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El grupo cervecero belga AB InBev se anotó un beneficio neto atribuido de 1.977 millones de dólares (1.803 millones de euros) en el primer semestre de 2023, un 16,8% más que en el mismo periodo del año pasado, según ha informado este jueves la empresa.
La facturación en la primera mitad del año fue de 29.333 millones de dólares (26.747 millones de euros), un 4,6% más, a pesar del retroceso del 3,2% de los ingresos en Norteamérica, con 7.926 millones de dólares (7.227 millones de euros).
Sin embargo, las ventas de la cervecera aumentaron un 9,7% en Sudamérica, hasta 5.849 millones de dólares (5.333 millones de euros), mientras que en Europa, Oriente Próximo y África (EMEA) facturó 4.070 millones de dólares (3.711 millones de euros), un 3,3% más, y el Asia Pacífico un 6% más, hasta 3.679 millones de dólares (3.355 millones de euros).
No obstante, en el segundo trimestre del año AB InBev obtuvo un beneficio neto atribuido de 339 millones de dólares (309 millones de euros), un 78,8% por debajo de las ganancias de 1.597 millones de dólares (1.456 millones de euros) del mismo periodo de 2022, mientras que sus ventas alcanzaron los 15.120 millones de dólares (13.787 millones de euros), un 2,2% más.
De cara al conjunto del ejercicio 2023, la compañía espera que su resultado bruto de explotación (Ebitda) crezca en línea con su perspectiva a medio plazo de entre el 4% y el 8% y que los ingresos crezcan por encima del Ebitda a partir de una combinación saludable de volumen y precio.
