Reino Unido evitó caer en recesión. En el primer trimestre del año, la economía británica se expandió un 0,1% frente a los tres meses anteriores, según los datos de la Oficina Nacional de Estadística (ONS). En términos interanuales, el Producto Interior Bruto (PIB) creció un 0,2%.
De esta manera, el nivel del PIB todavía se encuentra un 0,5% por debajo del cuarto trimestre de 2029, su nivel anterior a la pandemia.
En términos de producción, el sector servicios creció un 0,1% en el trimestre impulsado por incrementos en las actividades de información y comunicación, y servicios administrativos y de apoyo; en otros sectores, el de la construcción creció un 0,4%, mientras que el sector de la producción creció un 0,1%, con un crecimiento revisado del 0,6% en la manufactura.
Por otro lado, la tasa de ahorro de los hogares fue del 8,7% en el primer trimestre, frente al 9,3% del cuarto trimestre de 2022. La renta disponible real de los hogares cayó un 0,8% tras un crecimiento positivo del 1,3% en el cuarto trimestre del año pasado.
"El PIB continuó aumentando en el primer trimestre, a pesar de los fuertes golpes a la economía por los precios más altos de los bienes importados, como alimentos y energía, y los tipos de interés más altos, principalmente debido a la solidez de los balances del sector privado", destacan los analistas de Pantheon Macroeconomics.
"A medida que se intensifican las presiones del coste de vida, y con el Banco de Inglaterra continuando con su política de aumento de tipos en un esfuerzo por controlar la inflación, hay poco espacio para maniobrar sin inclinar a Reino Unido hacia territorio recesivo", comentan en interactive investor.
