El primer ministro británico, Boris Johnson, ha dicho este martes que Reino Unido podría abandonar las conversaciones comerciales posteriores al Brexit, un día después de que acordó reunirse con la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, en un último intento por evitar una división caótica de la Unión Europea (UE) a final de año.
Con poco más de tres semanas antes de que Reino Unido complete su salida del bloque, Johnson se reunirá con Von der Leyen en los próximos días después de que los negociadores no lograran cerrar las brechas.
Pero el ministro de Relaciones Exteriores de Irlanda dijo que el impasse era difícil de resolver y, a menos que haya un gran avance "en el próximo día o dos", los líderes de la UE reunidos en Bruselas el jueves y viernes tendrían que discutir planes de contingencia para un "sin acuerdo". "Desafortunadamente, nos enfrentamos a la perspectiva de un Brexit sin acuerdo si algo no lo rompe en los próximos días", dijo al parlamento en Dublín.
El lenguaje de ambas partes se ha endurecido desde que las conversaciones volvieron a flaquear, Johnson describió la situación como "muy complicada" y el negociador jefe de la UE dijo que el bloque estaba totalmente unido y "nunca sacrificaría nuestro futuro por el presente".
Cuando se le preguntó si intentaría hasta el último momento posible hacer un trato comercial, Johnson dijo a los periodistas: "Sí, por supuesto". “Siempre tenemos esperanzas, pero sabes que puede llegar un momento en el que tengamos que reconocer que es hora de dibujar tocones y que así es”, dijo Johnson, usando un término de críquet para el final del juego.
Ambas partes han pedido a la otra que se comprometa a llegar a un acuerdo sobre la línea y que vea la reunión, para la que no se ha anunciado una fecha, como el último lanzamiento de los dados para buscar una solución política a su estancamiento de meses.
