- Los expertos apuntan que la oferta más económica es la regulada por el Gobierno con discriminación horaria
- La demanda eléctrica es inelástica, pocos ciudadanos cambian sus hábitos por la subida de los precios
El precio mayorista de la electricidad se ha disparado en las últimas dos semanas hasta máximos que no se veían desde diciembre de 2013, el pico más alto alcanzado nunca que llegó hasta los 93,11 euros por megavatio hora (MWh). En el arranque de 2017 ha llegado hasta los 88 euros de media al día, lo que supone un incremento cercano al 40% respecto a enero de 2016.
Ante este escenario de subidas, todos los consumidores se preguntan cómo evitar que la factura de la luz suba 100 euros más al año respecto a lo que ya abona, como ha afirmado el propio ministro de Energía, Álvaro Nadal. ¿Valdrá con apagar las luces y no enchufar la estufa? ¿La lavadora debo ponerla al amanecer o a la hora de acostarme para ahorrar? Preguntas que sobrevuelan en la cabeza de muchos españoles estos días y a las que Bolsamanía da respuesta.
1. ¿Cómo ahorrar en una situación así?
Es complicado, apuntan todos los expertos. Un consumidor puede elegir entre acogerse al mercado libre o al mercado regulado, conocido como el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC). Antes de esta tarifa, estuvo vigente la Tarifa de Último Recurso (TUR), entre 2009 y 2014, en la que el precio del mercado se iba modulando cada trimestre frente a la comercialización que se hace ahora cada hora.
La PVPC siempre se ha considerado más competitiva para los usuarios particulares, porque es una fotografía más fiel de la situación del mercado, por lo que se aprovecha de las bajadas, pero también sufre los incrementos. Frente a la creencia generalizada de que los consumidores pagan en la factura de la luz por lo que consumen, con o sin contador inteligente, los usuarios no llegan a pagar por lo que gastan en su hogar, sino que se hace en función de la demanda nacional que supervisa Red Eléctrica.
2. Entonces, ¿es más económico el mercado libre?
El sistema liberalizado incluye un precio fijo para un período de tiempo, que suele ser un año, y el consumidor conoce en todo momento el coste que va a pagar durante ese período, algo parecido a lo que ocurre en la telefonía móvil. El precio puede llegar a ser más caro en situaciones en los que la subasta diaria de electricidad cotiza a la baja, como ocurrió buena parte del pasado año, en el que las renovables empujaron a la baja el precio mayorista, que llegó a los 24 euros por megavatio hora (MWh) en abril.
El comparador de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMC) indica que las ofertas más baratas en este momento para un consumidor medio que tenga contratado una potencia de 3,3 KW son las que ofrece Viesgo, con un importe de 605 euros, frente a la oferta más barata del PVPC que ofrece Factor Energía por 628 euros anuales, de mantenerse los precios actuales. En concreto, en el comparador se pueden ver 11 ofertas más económicas que el PVPC de Factor Energía.
Las ofertas más baratas de los ‘gigantes’ del sector se sitúan en los 626 euros del Plan Estable de Iberdrola, la Tarifa ONE Luz de Endesa que cuesta 632 euros al año, mientras que Gas Natural Fenosa establece su Tarifa Estable de Luz por 647 euros anuales.
3. ¿Qué recomendaciones dan los expertos?
En primer lugar, tener paciencia. Se trata de una situación coyuntural del mercado por la ola de frío, el freno de las renovables y el precio alcista de las materias primas para generar electricidad. Joaquín Giraldez, consultor energético de Ingebau, indica que “la mejor forma de ahorrar es estar en la tarifa regulada por el Gobierno, la PVPC, con discriminación horaria”. Con esta tarifa, si sólo consume un 70% en los tramos horarios más caros, entre las 19 y las 22 horas, se puede ahorrar un 15%. También es muy importante ajustar la potencia contratada a las necesidades de cada usuario, para no pagar por una potencia que no utiliza.
4. ¿Tienen algún efecto las campañas que promueven un apagón voluntario de los ciudadanos para mostrar su descontento por el precio de la electricidad?
Este miércoles se produjo una campaña que promovía precisamente ese objetivo. Sin embargo, Francisco Espinosa, director de la Asociación de Consumidores Eléctricos, apunta que “por el funcionamiento que tiene el mercado eléctrico, en el que se fija el precio mayorista con un día de antelación, si se produce un apagón masivo en una ciudad se notará en el precio del día siguiente, por una menor demanda en el mercado, pero no tiene un efecto inmediato a no ser que sea una campaña a la que se sumen muchos consumidores”.
5. ¿Cuándo se pagará por lo que se consume?
A partir de 2018 todos los consumidores que hayan contratado una potencia inferior a 15 kW deberán tener un contador digital, que podrá hacer una lectura remota y medida de cada hora. A partir de ese momento los usuarios sí notarán que pagan por lo que gastan en la factura de la luz. En concreto, del 35% del recibo que es el que tiene que ver con lo que marca el mercado, ya que el resto son peajes e impuestos regulados por el Gobierno.
6. A pesar de las recomendaciones, ¿qué saben las eléctricas y el Gobierno?
La demanda de los clientes domésticos es inelástica. Por muchas subidas que se produzcan del precio de la electricidad, casi ningún ciudadano va a cambiar sus hábitos de consumo y va a poner la lavadora a las 3 horas de la mañana, cocinar a la 1 de la madrugada, perderse su serie favorita de la televisión o no poner la estufa si hay una ola de frío siberiano sobre la Península Ibérica.
