"El euro ha producido dos décadas de estabilidad de precios incluso en países donde esta estabilidad había sido una memoria perdida hace mucho tiempo".
Es una de las principales declaraciones de Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE), en su discurso para celebrar el 20º aniversario de la moneda única. Unas palabras que se refieren indirectamente a España, donde la estabilidad de precios con la peseta era muy inferior a la de otros grandes países europeos.
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"Los precios estables han fomentado la confianza de la gente en el valor de sus ahorros, que es una de las condiciones para la prosperidad. Basadas en esa confianza, las empresas invierten y crean nuevos empleos", ha comentado el dirigente italiano.
No obstante, también ha reconocido que "en algunos países, no todos los beneficios del euro se han realizado en su totalidad". En su opinión, esto se "debe en parte a que las reformas a nivel nacional son necesarias, y lo serían en cualquier sistema monetario, para producir un crecimiento sostenible. Y en parte, porque la Unión Económica y Monetaria (UEM) sigue incompleta".
En este sentido, ha comentado que "se ha logrado un gran progreso desde la crisis, pero aún queda mucho trabajo por hacer; y no hay alternativa a un futuro en el que continuaremos trabajando juntos para hacer de nuestra UEM un motor de prosperidad aún mayor para todos sus estados miembros".
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Para Draghi, la capacidad de los países europeos para preservar su "soberanía en asuntos relevantes" sólo es posible mediante la "unión" creada por los diferentes estados para compartir una política monetaria común. "Juntos tenemos una voz en la regulación de los mercados financieros internacionales. Una voz que ha sido fundamental para reformar la regulación mundial después de la crisis financiera", ha señalado.
"Con el Mercado Único, tenemos un poderoso motor de crecimiento sostenible para sustentar nuestros estándares de vida. El euro ha salvaguardado la integridad del Mercado Único. Hoy, nuestras economías están integradas en un punto que no era imaginable cuando se diseñó el euro", ha señalado Draghi.
"Las exportaciones dentro de la UE aumentaron del 13% del PIB de la UE en 1992 al 20% actual; y las cadenas de valor están presentes en cualquier parte de la zona euro", ha añadido el banquero central, que abandonará su puesto al frente del BCE en el mes de octubre.
