ep el presidente de la patronal ceoe antonio garamendi se dirige a ofrecer una rueda de prensa en
Ricardo Rubio - Europa Press - Archivo

El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha admitido este jueves que España está en desaceleración, en línea con la desaceleración mundial, y ha asegurado que la economía española podría crecer este año por debajo del 2%, que coincide con la última previsión de Funcas (1,9%).

Durante un acto de nueva Economía Fórum, Garamendi ha explicado que esta estimación "podría acabar corrigiéndose de alguna manera", pero la CEOE mantiene, por ahora, su última previsión de crecimiento, que apunta a un avance del PIB este año del 2,1%.

Pese al dato, el dirigente empresarial ha pedido optimismo y trabajar para generar riqueza en el país. "Hay que ser optimistas, porque es fundamental también estar orgullosos de nuestro país y vender que España merece la pena", ha insistido.

Según Garamendi, "la desaceleración es mundial y lo único que dice la CEOE es que se necesitan grandes pactos de Estado y hacer las reformas que sean necesarias, pero hablando todos los temas en común y no jugando con los efectos partidistas y la campaña electoral".

En este sentido, el presidente de la CEOE ha insistido en que es fundamental "hablar bien de España" y ha recordado que la mayor parte de la deuda está en manos extranjeras y en fondos internacionales. "Hay que creer en nuestro país, porque el exterior está creyendo en él y es un mensaje fundamental para la ciudadanía y los españoles", ha remarcado.

PENSIONES

Garamendi también ha querido hablar sobre la subida de las pensiones para el próximo año y ha asegurado que es uno de los temas "más importantes" para el país: "No me gustó cuando se rompió la mesa el Pacto de Toledo", ha criticado.

"Pedimos que se vuelva a organizar y que la gente se siente en la Comisión y cuente con la participación de los agentes sociales, porque es en el marco donde hay que hablar. No es un tema de campaña política", ha denunciado.

Sin embargo, ha evitado opinar sobre si la subida debería estar ligada al IPC o no, y ha asegurado que "del 10 de noviembre al 31 de diciembre hay mucho tiempo para hablar de esto".

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