El barril de Brent se gira a la baja este jueves tras superar los 90 dólares, tras tocar un máximo intradía en 90,42 dólares. De esta forma, el crudo ha alcanzado máximos no vistos desde 2014. Todo ello en medio de un clima de tensión por la crisis geopolítica en Ucrania. El West Texas Intermediate, referencia estadounidense, cede hasta 87 dólares desde los casi 88 dólares de hace unas horas.
La caída se ha producido en medio de las crecientes tensiones geopolíticas entre Rusia y Ucrania, y mientras la oferta sigue siendo escasa en medio de un repunte de la demanda, según ha apuntado 'CNBC'.
Las tensiones no han hecho más que aumentar la preocupación por los diversos factores que contribuyen a un mercado ya ajustado. La OPEP+ está teniendo problemas para cumplir los objetivos mensuales de producción mientras restablece el suministro a los mercados tras los drásticos recortes de 2020, y EEUU está a más de un millón de barriles de su nivel récord de producción diaria. El organismo se reúne el 2 de febrero para considerar otro aumento de la producción.
"Los precios del petróleo se han mantenido en un nivel bajo, con pocos indicios de que las tensiones que han contribuido a la subida de los precios estén disminuyendo", comenta Michael Hewson, de CMC Markets.
Los inventarios en EEUU aumentaron en la última semana, con un incremento de las existencias de crudo de 2,4 millones de barriles, frente a las expectativas de un modesto descenso de las mismas. Los inventarios de gasolina subieron a su nivel más alto en casi un año, un bálsamo necesario para el mercado.
