Las Asociaciones bancarias AEB y CECA han analizado los detalles técnicos de la medida tras el registro de la proposición de Ley para el nuevo impuesto a los bancos. Este impuesto afecta a la capacidad de las entidades de dar crédito y podría tener consecuencias para la estabilidad financiera.
El comunicado de AEB y CECA ha expuesto que la decisión del Gobierno de presentar en el Congreso de los Diputados un nuevo impuesto a los bancos es una medida que no logrará su objetivo de combatir la inflación. De hecho, han subrayado que entorpecerá la recuperación económica y la creación de empleo, en un contexto de incremento de los precios y de tensiones geopolíticas.
El sector bancario español realiza una contribución relevante a la economía y a la sociedad del país, asimismo a la sostenibilidad del gasto público a través de tributos específicos. Por ello, una medida de este tipo afecta a las decisiones de crédito y riesgo de las entidades, además de a su capacidad competitiva en el mercado único europeo.
Tras el registro de la proposición de Ley sobre el gravamen, las asociaciones bancarias han analizado los detalles técnicos de esta propuesta de Ley.
Ante esto, se mantienen en una postura de diálogo con el Gobierno y con los grupos parlamentarios en su tramitación, sobre la base, manifiestan, "de un adecuado encaje con los principios básicos de nuestro sistema tributario como son los de igualdad, no discriminación y capacidad económica".
