casa vivienda hipoteca mueble

Tras un año en el que las hipotecas sobre viviendas han registrado importantes caídas y la contratación se ha centrado en las de interés mixto, ¿qué traerá 2024 para el mercado? La bajada general y pronosticada de los tipos de interés reactivará la demanda, que irá hacia un producto a tipo fijo competitivo.

"Creemos que se desviará la atención hacia el producto a tipo fijo, con un acceso a un producto competitivo que no esté estrictamente enfocado a un perfil luxury, sino que se ampliará su espectro a perfiles estándar", señalan desde la plataforma hipotecaria Hipoo.

Apuntan, además, que "la hipoteca a tipo mixta irá decreciendo conforme los tipos vayan bajando, así como la hipoteca variable es posible que vuelva a ser un producto atractivo para determinados perfiles".

Las perspectivas del mercado hipotecario en 2024 son muy buenas para Trioteca. A su parecer, es previsible que veamos mejores ofertas a tipo fijo después de un año de encarecimiento. "Por lo tanto, incluso aunque el euríbor siga descendiendo, el escenario se muestra muy positivo para aquellas personas que quieren acogerse a la seguridad que ofrece saber la cuantía de la cuota hipotecaria".

Otro punto de vista tienen en el comparador financiero HelpMyCash. "En 2024, es muy probable que la contratación de hipotecas seguirá un tanto floja, los bancos han cerrado el grifo y prestarán con mejores condiciones, como ya lo hicieron en 2023, a perfiles con menos riesgos", aseguran. Para aquellos que tengan un buen perfil mandan un aviso: hay que aprovechar. "Los bancos se pelearán y serán más agresivos para conseguir a los mejores clientes".

Y esto en un mercado inmobiliario que creen que se mantendrá tenso, con la vivienda sin anticipar bajadas ni subidas brutales de los precios. "La oferta seguirá escasa y esto provoca que los precios no bajen como se espera".

Con este escenario, ¿es mejor una hipoteca a medio o a largo plazo? "El plazo ideal de la hipoteca y el banco elegido dependerán de la edad, la capacidad económica, las preferencias financieras y el uso que se le vaya a dar al inmueble", según la consultora hipotecaria Bayteca. Así, en líneas generales, la respuesta depende de cada caso y se debe basar principalmente en dos claves.

En primer lugar, a la suma de la hipoteca. "A menor plazo, mayor será la cuota mensual y, cuanto mayor sea la cuota mensual, existirá menor elegibilidad, es decir, menor será la cantidad máxima que se puede solicitar en la hipoteca". En segundo lugar, a los intereses a pagar. "A menor plazo, mayor será la cuota mensual y esto también implica que se pagará una cantidad menor de intereses a lo largo de la hipoteca. Además, algunos bancos tienden a bajar el tipo de interés si el plazo de la hipoteca se acorta".

Teniendo en cuenta estos dos puntos, explican que las personas con menores ingresos pueden optar por las hipotecas a largo plazo para ampliar su capacidad de compra, mientras que las personas que cuenten con ingresos más altos, pueden optar por acortar el plazo para disminuir el tipo y la cantidad de intereses pagados en total.

Desde la consultora hipotecaria indican que otras dos variables a tener en cuenta son el uso que vayamos a dar a la vivienda y el plan de pago (donde puede haber un adelantamiento). Las hipotecas tienen dos comisiones clave a considerar si pensamos vender nuestra propiedad durante el ciclo de vida de la hipoteca o si pensamos en cancelar parcial o totalmente la hipoteca (adelantar pagos): la comisión por cancelación parcial y la comisión por cancelación total, recuerdan.

Además, cada banco tiene sus condiciones y estas cláusulas les permiten cubrirse ante una potencial venta del inmueble y la cancelación del préstamo, ya que en este caso estaríamos quitándole al banco sus ingresos futuros. Generalmente, las hipotecas de tipo fijo cuentan con comisiones más altas que las de tipo variable.

Otra de las claves a tener en cuenta dentro de las vinculaciones habituales en las hipotecas es el seguro de vida. Por ejemplo, una bonificación por seguro de vida podría corresponder a una rebaja del 0,5% en el tipo de interés. Sin embargo, el seguro de vida tiene un coste variable que aumenta cada año. Así, llega un punto avanzado en la hipoteca donde la rebaja no compensa por el coste del seguro.

El último factor a la hora de escoger una hipoteca es la edad de la persona. Cada banco tiene un límite de edad hasta el que concede préstamos, que ronda entre 75 y 80 años. Por ende, si una persona tiene 65 años, hay bancos que le concederían un plazo máximo de 10 años mientras que otros se lo concederían de 15 años. Además, cada banco tiene un plazo mínimo de hipoteca (algunos prestan a un año y otros, como mínimo, a 10 años).

Noticias relacionadas

contador