- La perspectiva 'negativa' contempla los retos estratégicos en el corto plazo
Moody's ha confirmado el rating a largo plazo sobre Banco Popular Espanol en Ba2 (en 'bono basura'), aunque ha cambiado la perspectiva del depósito a largo plazo de "positiva" a "negativa", lo que implica que puede adoptar una rebaja de la calificación próximamente.
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"La acción de calificación de hoy sigue a la publicación por Banco Popular de sus resultados de 2016, que presenta progresos más lentos hacia sus objetivos estratégicos para 2016-2018 de lo previsto. A pesar del aumento de capital y un incremento en las provisiones, el banco no alcanzó su objetivo de acelerar la disposición de activos problemáticos y aumentar significativamente su cobertura de préstamos problemáticos.
Banco Popular se encuentra ahora bajo presión para acelerar la ejecución de su estrategia
En opinión de Moody's, Banco Popular se encuentra ahora bajo presión para acelerar la ejecución de su estrategia y tiene ante sí desafíos significativos en la calidad de los activos y su capacidad de absorción de riesgos. "La nueva cúpula del banco está revisando el plan existente de venta de activos y puede redefinir sus objetivos estratégicos y buscar medidas alternativas para mejorar el perfil de riesgo del banco", advierte la agencia.
Adelanta, además, que la perspectiva 'negativa' contempla los retos estratégicos en el corto plazo y la presión en el perfil de crédito del banco y refleja una posible rebaja en el caso de que no se cumplan las expectativas de la agencia relacionadas con el desapalancamiento de su balance, que podría desembocar en mayores pérdidas.
MÁS REBAJAS
Esta no es la única rebaja en su calificación que ha recibido la entidad. El pasado mes de febrero, Fitch redujo su rating hasta B+ desde BB-. La razón de esta rebaja en la calificación se debe a unas pérdidas mayores de lo esperado en 2016. La perspectiva que le daba era "en evolución".
Hace algo más de un mes, la agencia de calificación crediticia S&P decidió rebajar la perspectiva de Popular de 'positiva' a 'estable' y mantener su rating a largo plazo en 'B+' ('grado de especulación'). Esta decisión reflejaba la visión de S&P de que el banco está "fallando" a la hora de restaurar su perfil financiero como estaba previsto.
Por otro lado, su actual presidente, Emilio Saracho, propondrá en la Junta Ordinaria de Accionistas del 10 de abril, una ampliación o convertibles. El banco pedirá autorización para ampliar hasta el 50% de su accionariado y sopesa emitir convertibles en acciones para captar 2.500 millones.
