MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
La película 'La enfermedad del domingo', de Ramón Salazar, llega este viernes a los cines españoles unos días después de su puesta de largo en la Berlinale, con una historia protagonizada por Bárbara Lennie y Susi Sánchez sobre el abandono "devastador" de una madre y las expectativas de su hija 35 años después.
La película está contada desde el punto de vista de la madre, Anabel (Susi Sánchez), y recurre al "desconcierto" de no saber qué ocurre y a un "juego psicológico" entre Chiara y el espectador que viste de "cine de intriga" o "thriller" la película.
Según ha explicado Ramón Salazar a Europa Press, esta película nació de una conversación con una amiga psicóloga, quien le habló del mensaje que queda en una niña abandonada, que no es el mismo que el que queda si es un padre el que se va. La frase "tu vida no merece ser vivida" le pareció "tan apabullante" que comenzó a imaginar cómo sería la vida de una hija con ese mensaje en el subconsciente.
Por ello, el director se centró en contar todo aquello que Chiara se perdió al no tener a su madre y cómo este personaje trata de provocar situaciones que no ha vivido, como la primera borrachera. "¿Cómo puede definir ese mensaje la trayectoria de una vida y qué es lo que inconscientemente provoca eso para que Chiara quiera reunirse con su madre y poder cerrar esa herida?", se pregunta el director.
Salazar se preguntó cómo era posible "resumir 35 años de abandono en diez días", que es el tiempo que pasan juntas tras el reencuentro, algo "imposible" y motivo por el que los personajes dan "bandazos emocionales" al no saber qué esperar la una de la otra, como si estuvieran en una "especie de limbo en el que transitan por situaciones emocionales".
Una de las máximas de la película era "no hablar del abandono o de la enfermedad", que los personajes no lo verbalizaran a lo largo de la historia y que potenciara el poso que querían dar a los personajes, para que "los silencios y miradas estuvieran cargados".
BÁRBARA LENNIE Y SUSI SÁNCHEZ
Según ha explicado Salazar, las actrices conocían sus circunstancias, pero esta información "no era intercambiable", sino que el trabajo se construyó "por separado" e incluso durante el rodaje no había "indicaciones comunes", sino "en secreto".
En este sentido, Susi Sánchez, que estuvo presente en la elaboración del guion, ha indicado que Salazar "juega con los secretos" para provocar a través de esa dinámica. De hecho, ha relatado que durante el rodaje le ordenó no comunicarse con su hija en la ficción, papel interpretado por Greta Fernández, a pesar de las "ganas locas" que tenían de comunicarse.
Bárbara Lennie, por su parte, describe al cineasta como alguien "muy generoso", que reunió "mucha biografía escrita" antes de comentar la ficción sobre los 35 años en los que su personaje había vivido sin madre.
"Exigía entrega, como los buenos directores. Son una figura muy exigente y él tenía muy claro el trabajo, y esperaba eso de nosotras. Puso en nuestras manos una historia importante y nos hizo responsables de contarla, y eso exige mucha entrega y detalles", ha dicho.