Su edil Josep Garganté prevé denunciar a un mosso este martes por hechos del domingo

BARCELONA, 30 (EUROPA PRESS)

La CUP Capgirem Barcelona ha criticado este lunes la "extrema impunidad con la que los Mossos d'Esquadra usan la violencia física" en los disturbios tras el desalojo del 'Banc Expropiat' de Gràcia y en los casos de la mujer que perdió un ojo en la huelga general de 2012, Ester Quintana, y en el de la detención mortal del vecino del Raval Juan Andrés Benítez en 2013.

"El dispositivo policial excesivo ha convertido Gràcia en una zona prácticamente tomada por antidisturbios armados, policía secreta con armas prohibidas por el Parlament y el helicóptero de vigilancia", ha aseverado en un comunicado la CUP, cuyo edil Josep Garganté prevé denunciar este martes a un agente de la policía catalana por haberle golpeado con una porra durante las protestas por el desalojo de la sucursal 'okupada'.

La organización ha asegurado que el dispositivo policial "ha agredido a un centenar de personas, hecho que prácticamente no ha sido destacado hasta que una de las personas agredidas ha sido el concejal Josep Garganté".

Ha defendido que "todas las agresiones de los Mossos d'Esquadra son igualmente denunciables" y que la CUP no contribuirá a silenciar estas actuaciones, por lo que rechazan participar en un debate sobre la agresión a Garganté que ve como una superficialidad malintencionada, en sus palabras.

El grupo municipal ha aseverado que, tanto en el caso de Quintana como en el de Benítez, han existido "agresores confesos o claramente culpables de mutilación o muerte, respectivamente, y han sido absueltos".

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