MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
La Organización de Productores Asociados de Grandes Atuneros Congeladores (OPAGAC) destinará en 2018 un total de tres millones de euros al desarrollo del Proyecto de Mejora de la Pesquería (FIP, por sus siglas en inglés) que, en colaboración con la ONG WWF, pretende garantizar la sostenibilidad del cien por cien de su flota antes de 2021 cuando aspira a lograr la certificación de Marine Stewardship Council (MSC).
Durante la presentación de resultados del primer años del FIP, que han calificado de "pionero" y "ejemplo a imitar" por otros países con flota atunera, el director ejecutivo de OPAGAC, Miguel Ángel Herrera, ha anunciado que en el próximo mes de abril presentarán el sello de certificación de pesca sostenible que ha desarrollado AENOR.
Herrera ha precisado que el objetivo de los atuneros españoles es lograr una certificación ambiental como MSC en 2020 tras el desarrollo de su FIP, que tiene una duración prevista de cinco años y que se basa en tres objetivos: garantizar que los stocks pesqueros son sostenibles; buscar el mínimo impacto ambiental de la pesca en los ecosistemas, en tercer lugar, mejorar los mecanismos de control y penalizar a quien no respete el recurso.
De momento, ha celebrado los resultados del primer año ya que han superado "ampliamente" las metas previstas en el FIP en todos sus objetivos. Para el segundo año, ha indicado que contribuirán al avance de las organizaciones regionales de pesca; contribuir a la evaluación y la reducción de impactos de los FAD (los dispositivos de concentración de pesca).
A diferencia de lo que ocurre con el resto de las flotas --la mayoría de ellas asiáticas o de América Latina-- ha indicado que para lograr este reto el "cien por cien" de los 47 buques atuneros españoles están equipados con un observador científico en cada barco; cuentan con sistemas de seguimiento GPS y varias cámaras en cada pesquero que graban todas las operaciones que se realizan a bordo y que, una vez en tierra, son visualizadas para registrar cada actividad.
Con todo ello, tanto OPAGAC como WWF valoran que se ha reducido en el primer año la mortalidad de especies que no eran el objetivo de pesca, como aves, tortugas boba, tiburones y otras, tras la formación de 500 capitanes y marineros españoles, también en protocolos para liberar a los ejemplares capturados accidentalmente. "Ha habido bastantes progresos", ha celebrado.
En total, ha indicado que todos estos avances han supuesto hasta la fecha una inversión de 9 millones de euros.
Por su parte, el director gerente de OPAGAC, Julio Morón, ha indicado que esta iniciativa es fruto del interés particular y del compromiso de las empresas del sector en alcanzar un estándar de sostenibilidad y que no cuenta con ningún apoyo económico de administración alguna y asegura que este FIP ha situado a España a la cabeza de la lucha por la sostenibilidad y la certificación pesquera a nivel mundial.
De hecho, el responsable de pesca de WWF, Raúl García, ha defendido que España es el país que mejor está aplicando el reglamento europeo contra la pesca ilegal pero, junto con su compañero en la ONG José Luis García Varas, han reclamado el ideal de construir un estándar europeo y mundial para que "a todos se les exija lo mismo".
"En un año, este proyecto de mejora de la pesquería se ha convertido en referente para otras empresas y en líder a nivel mundial", ha manifestado, aunque considera que queda mucho por hacer, especialmente a la hora de concienciar a los consumidores en la importancia de exigir un pescado capturado de manera sostenible y un etiquetado real.
Morón ha insistido en que este FIP es la "primera iniciativa del mundo" que aborda de manera integral una gestión sostenible del atún. "Los consumidores pueden optar por un alimento elaborado con materias primas que proceden de una flota que trabaja activamente por su sostenibilidad", ha advertido.
Finalmente, ha señalado que durante este segundo año se seguirá avanzando en la consecución de estos objetivos después de haber incluido en su primer ejercicio las tres especies de su flota, el atún listado, el rabil y el patudo en los océanos Atlántico, Índico y Pacífico.