La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado sobre el avance de la variante de Covid-19 EG.5, más conocida como "Eris", que fue observada por primera vez el 17 de febrero de este año y se designó como una variante bajo supervisión el 19 de julio.
El organismo asegura que "a nivel mundial, ha habido un aumento constante en la proporción de EG.5 informados", ya que entre el 17 y el 23 de julio, la prevalencia global de EG.5 fue del 17,4%, lo que representa un "aumento notable" en relación con los datos de las últimas cuatro semanas, que muestran una prevalencia de esta variante del 7,6%.
Hasta el 7 de agosto de 2023, se han enviado a la plataforma GISAID un total de 7.354 secuencias de Omicron EG.5 procedentes de 51 países para su estudio. La mayor parte de las secuencias son de China (30,6%), que se sitúa por encima de países como Estados Unidos (18,4%), la República de Corea (14,1%), Japón (11,1%), Canadá (5,3%), Australia (2,1%), Singapur (2,1%), Reino Unido (2,0%), Francia (1,6%), Portugal (1,6%) y España (1,5%).
Sin embargo, la OMS considera que "con base en la evidencia disponible, el riesgo para la salud pública que representa EG.5 se evalúa como bajo a nivel mundial".
"Si bien EG.5 ha mostrado una mayor prevalencia, ventaja de crecimiento y propiedades de escape inmunitario, no se han observado cambios en la gravedad de la enfermedad hasta la fecha. Mientras que los aumentos concurrentes en la proporción de EG.5 y las hospitalizaciones por COVID-19 (más bajas que las olas anteriores) se han observado en países como Japón y la República de Corea, no se han realizado asociaciones entre estas hospitalizaciones y EG.5", añade.
A pesar de esto, alerta de que "debido a su ventaja de crecimiento y características de escape inmunológico, EG.5 puede causar un aumento en la incidencia de casos y volverse dominante en algunos países o incluso a nivel mundial".
EG.5 lleva una mutación de aminoácido F456L adicional en la proteína de pico en comparación con las subvariantes XBB.1.9.2 y XBB.1.5. Dentro del linaje EG.5, la subvariante EG.5.1 tiene una mutación de pico adicional Q52H y representa el 88% de las secuencias disponibles para EG.5 y sus linajes descendientes.
