Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) han abierto la posibilidad de que las personas puedan empezar a reunirse sin mascarilla aunque, eso sí, siempre que estén ya vacunados. Un paso que podría ser adoptado como medida real en Estados Unidos en los próximos días y que serviría a modo de prueba para que el resto de países lo imitasen, con el fin de recuperar la "normalidad".
Las personas vacunadas contra el covid-19 podrán reunirse entre ellas por pequeños grupos en sitios cerrados sin llevar mascarilla ni respetar el distanciamiento social, han indicado este lunes las autoridades sanitarias de Estados Unidos. Se considera que una persona está vacunada cuando pasaron dos semanas desde la inyección de la segunda dosis, en el caso de los productos de Pfizer/BioNTech y Moderna, o de la dosis única, en el caso de Johnson & Johnson, ha precisado Rochelle Walensky, directora de los CDC.
Quienes hayan sido vacunados también pueden reunirse sin mascarilla con personas no inmunizadas de otro hogar si no tienen factores de riesgo frente al Covid-19, ha dicho en rueda de prensa Rochelle Walenski, la directora de los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades (CDC), la principal agencia federal de salud pública del país.
Los vacunados que se reúnan con personas sin inmunizar de varios hogares distintos a la vez, sin embargo, tendrán que seguir llevando mascarilla y mantener el distanciamiento social. Y deberán hacer lo mismo en los espacios públicos y evitar los viajes y reuniones con mucha gente.
Se trata de una recomendación que solo afectaría al 10% de la población, los que ya están vacunados, y estos grupos servirían de prueba ante futuras reuniones más multitudinarias de cara al verano. "Creemos que estas nuevas recomendaciones son un primer paso importante en nuestros esfuerzos por reanudar las actividades diarias en nuestras comunidades", ha señalado Rochelle Walensky.
Los CDC también hacen un llamamiento a evitar las reuniones masivas, unos encuentros que llegarán según vaya aumentando el ritmo de vacunación y caigan los contagios. Algo que, según ha estimado la Casa Blanca en los últimos días, podría llegar para finales de mayo cuando se alcance una inmunidad de rebaño.
