Biden mandará al extranjero 20 millones de vacunas de Pfizer, Moderna y J&J

Se trata de la primera donación de vacunas contra el coronavirus que hará el país. Son fármacos que han sido aprobados por la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) para uso doméstico. Pero además, Washington se ha comprometido a repartir hasta 60 millones de dosis de la vacuna de AstraZeneca, aún pendientes de recibir la aprobación de las autoridades sanitarias estadounidenses.

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La decisión de la Administración Biden se enmarca en la mejora de la situación que se ha producido en el país, según recoge El País. Y es que los contagios han disminuido considerablemente en los 50 Estados por primera vez desde que comenzó la pandemia. "No puedo prometer que esto continuará así. Sabemos que habrá avances y retrocesos, y sabemos que pueden ocurrir muchos brotes", ha advertido el presidente, aunque reconoce que ahora mismo las cifras son positivas.

Como ha recordado, el 60% de los estadounidenses ya ha recibido al menos una inyección y al menos 120 millones están completamente vacunados. Así, con los contagios y muertes en caída, el presidente quiere enfocar ahora sus esfuerzos en ayudar a los territorios que están lejos de haber controlado la pandemia, como la India y Brasil.

Por ello Biden ha encargado a Jeff Zients, coordinador del coronavirus de la Casa Blanca, que coordine este envío de vacunas. Zients trabajará con Gayle Smith, al frente de la "diplomacia de la vacuna" en el Departamento de Estado y con el Consejo de Seguridad Nacional, entre otras agencias gubernamentales, para proceder a la donación anunciada por el demócrata.

PRESIONES A EEUU

EEUU ha decidido donar estos fármacos una vez que la situación parece controlada en el país. Varios organismos internacionales llevan meses presionando para que Washington done parte de sus vacunas sobrantes a los países donde la pandemia está descontrolada o no cuentan con vacunas suficientes para proteger a su población, como han hecho otros países, entre ellos España.

Allí la situación ha mejorado hasta tal punto que hace unos días el CDC (Centro de Prevención y Control de Enfermedades, por sus siglas en inglés) marcó un punto de inflexión al autorizar a todas aquellas personas que hayan completado el proceso de vacunación contra el Covid a prescindir de la mascarilla tanto al aire libre como en lugares cerrados, y no cumplir con la recomendación de guardar la distancia de física, incluso cuando se encuentren entre multitudes.