China ha recortado su cartera de bonos del Tesoro americanos hasta mínimos de los dos últimos años. Los últimos datos publicados muestran que, durante el mes de marzo, el Gobierno de Pekín redujo su cartera de bonos en 20.500 millones de dólares, hasta 1,12 billones, mientras ambos países se encuentran en plena guerra comercial.
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China es el principal tenedor de bonos estadounidenses, pero desde el máximo de 2012 ha reducido su cartera en 200.000 millones de dólares. Y en el último año, el ritmo de la reducción ha sido aún mayor, ya que ha alcanzado los 67.200 millones, una caída del 5,6%.
Según informa CNBC, estos movimientos pueden tener una doble finalidad. Por un lado, presionar al Gobierno americano en las negociaciones comerciales, y por otro defender el yuan, la divisa china, tras los aranceles impuestos por la Administración Trump.
Pekín aún se mantiene como el principal acreedor extranjero de EEUU, por delante de Japón, que controla 1,08 billones de dólares en deuda americana, y de Reino Unido, que ostenta 317.000 millones de dólares. Los gobiernos extranjeros controlan de forma global 6,47 billones de deuda americana, un 4% más que hace un año.
TRUMP VETA A HUAWEI
Donald Trump declaró este miércoles una emergencia nacional, por amenazas contra la tecnología estadounidense, contra empresas que suponen un riesgo para las redes de comunicaciones estadounidenses, como Huawei, según informó la Casa Blanca en un comunicado.
La medida, realizada a través de una orden ejecutiva, autorizó al Secretario de Comercio Wilbur Ross, en consulta con otros altos funcionarios, a bloquear las transacciones que involucran información o tecnología de comunicaciones que "plantea un riesgo inaceptable para la seguridad nacional de los Estados Unidos".
Tras la orden, el Departamento de Comercio de EEUU anunció la incorporación de Huawei Technologies y sus afiliados a la Lista de Entidades de la Oficina de Industria y Seguridad (BIS), lo que dificulta que el gigante chino de las telecomunicaciones realice negocios con empresas del país.
La adición significa que las compañías estadounidenses no pueden vender o transferir tecnología a Huawei sin una licencia emitida por el BIS. Eso podría dificultar a Huawei hacer negocios, ya que depende de algunos proveedores de piezas estaounidenses.
