Starbucks cuenta con más de 20.000 tiendas en 65 países alrededor del mundo. Lo más importante ha sido su redefinición del café y de la experiencia de tomarlo. La compañía, que comenzó en 1971 en Seattle, es conocida por ofrecer un café de alta gama para las masas, como si fuese uno de los cafés normales que te tomarías en un bar de tu vecindario.
Starbucks también ha creado una generación de bebedores de café a los que no le importa el precio a pagar por un taza. En gran parte, este éxito se debe a que la cadena ha convertido sus establecimientos en un lugar de reposo cómodo fuera de casa y de la oficina. También influye su destacada filosofía empresarial con conciencia social, donde incluso los empleados a tiempo parcial pueden recibir incentivos.
1. MUCHOS AMANTES DEL CAFÉ NO AMAN SU CAFÉ.
Starbucks Corp ha acumulado casi 15 mil millones de dólares en ingresos el pasado año, un 12% más que el año anterior. Sin embargo, la compañía todavía tiene muchísimos detractores, sobre todo cuando se trata de su producto principal: el café. La empresa tiene denuncias sobre sus ofertas de Java, que afirman que este tiene un tostado demasiado duro que rebaja la calidad.
Además, muchos de sus productos no han pasado las pruebas de sabor en estudios como el de Consumer Reports. En de estas pruebas, realizada en 2013, una revista de San Francisco encontró que el “Starbucks Medium Roast House Blend” era el peor de 6 cafés envasados que se probaron.
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2. EL EXTRAÑO CASO DEL PUMPKIN SPICE LATTE QUE NO LLEVA CALABAZA.
Una de las bebidas más especiales de la cadena Starbucks (fuera de españa) es un Latte espe
ciado con calabaza (pumpkin en inglés). Según Market Watch, se han vendido más de 200 millones de unidades de esta bebida. De hecho, es tan popular, que para referirse a ellas utilizan sus siglas PSL.
Sin embargo, algunos expertos en nutrición y profesionales de la salud se han quejado de que esa y otras bebidas de Starbucks tienen demasiados productos químicos. El blogger de alimentación Vani Hari, ha adoptado una posición muy dura contra el PSL, señalando que la bebida tiene sabores artificiales y que “no lleva calabaza real”.
Un portavoz de la compañía ha dicho que se busca gradualmente la eliminación de muchos de los productos químicos y sabores artificiales, pero que, mientras tanto, el nivel que utiliza PSL lo hace seguro para el consumo. En cuanto a la calabaza, asegura que “cuenta con inconfundibles especias propias del pastel de calabaza, aunque no de calabaza real”.
3. LA COMBINACIÓN SECRETA
Starbucks ofrece un montón de de opciones en cuanto a bebida se refiere, pero al parecer, esto no es suficiente. Por eso, se ha creado una tendencia que se trata de pedir las “bebidas secretas” a los baristas, que, según parece, podrían elaborarla con los ingredientes que hay en todos los establecimientos, aunque no aparezcan en la carta.
La clave, según la web Starbucks Secret, es que los clientes que se saben la receta la pidan, ya que no todos los baristas estarán familiarizados con ella. Ah, por supuesto, estas bebidas secretas también conllevan gastos adicionales.
4. STARBUCKS PIENSA A LO GRANDE
La compañía consigue el 25% de sus ingresos de productos que no son bebidas. De hecho, una parte sustancial de las ventas proviene de bebidas que no son café. La cadena borró la palabra “coffee” de su logotipo en 2011 y entre sus adquisiciones más recientes están el menaje para preparar diversos tes, la compañía de zumos Evolution Fresh y La Boulange Cafe & Bakery.
Es cierto que no es la primera compañía que sale de su zona de confort, pero algunos analistas de inversiones han expresado su preocupación por la expansión, que puede provocar cosas tan comunes como largas cosas en los establecimientos y empleados descontentos.
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5. STARBUCKS TAMBIÉN HA TENIDO FRACASOS
Starbucks ha tenido un montón de bebidas innovadoras como el Pumpkin Spice Latte, pero también ha tenido productos que no han triunfado en absoluto. Uno de estos era el Mazagran, un híbrido entre café y refresco de cola embotellada; el Chantico, un chocolate similar al chocolate caliente europeo; y el Sorbetto, una mezcla de yogur y picante frío que, en palabras de Market Watch, rozó la locura.
Este tipo de fracasos no significan demasiado para los clientes promedio, sin embargo, pueden tener un impacto negativo en el balance final de una empresa.
6. LOS EMPLEADOS QUE STARBUCKS LLAMA “SOCIOS”.
Normalmente, las prácticas laborales de Starbucks son bastante buenas. En la revista Fortune, se establece a la compañía como una de las “100 mejores empresas para trabajar”. Pero sus relaciones con sus empleados, a los que Starbucks llama “socios” se han visto afectada por algunos baches en los últimos años.
En 2013, los trabajadores demandaron a la empresa porque se les impidió tomar los descansos que debían durante los turnos. Además, recientemente, la empresa ha sido objeto de críticas por no dar a los empleados sus horarios con antelación suficiente, lo cual dificulta compaginar el trabajo con la vida familiar y otros empleos.
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7. CADA VEZ HAY MÁS COMPETENCIA
Starbucks es, en muchos sentidos, como si McDonalds no tuviese a Burger King en frente, es decir, la cadena no tiene un rival especialmente notorio en lo que al café de alta gama se refiere. Pero eso está cambiando.
En los últimos años se ha extendido una ola en la que los cafés elaborados de forma artesanal están llamando la atención a muchos negocios. Las cadenas de cafeterías están optando por comprar granos de cultivo único, refinar las técnicas de tostado y, en definitiva, ampliar su oferta para parecerse cada vez más a la compañía que empezó en Seattle.
8. DEMASIADAS CALORÍAS EN UN VASO TAN PEQUEÑO
La mayoría de los famosos Frappuccinos tienen más de 400 calorías, de hecho, el Chocolaty Viruta Frapucc
ino roza la marca de las 500 calorías. Si añadimos una tarta de limón de 470 calorías y un café en el descanso, la merienda podría rondar las 1.000 calorías.
Poniendonos en perspectiva, un Big Mac y una Coca-Cola grande en Mcdonalds equivalen a 810 calorías, esto también es alto, teniendo en cuenta que un adulto de entre 31 y 50 años necesita entre 1.800 y 2.200 calorías diarias.
Los portavoces de Starbucks se han comprometido a ser “transparentes con la lista de ingredientes completa”. Ademá, la cadena tiene en su web una sección dedicada a “Deliciosas bebidas de menos de 200 calorías” y un recuento calórico en el menú.
9. TAMBIÉN SIRVEN DEMASIADA CAFEÍNA
Muchos bebedores de café dependen de la bebida por la dosis de cafeína que esta proporciona. En el caso de algunas bebidas de Starbucks, obtendrán más de la esperada.
Según el Center for Science in the Public Interest, un grupo de defensa que centra su acción en la buena nutrición, los niveles de cafeína de las tazas medianas de café de Starbucks llegaba a 330 miligramos por taza; mientras que el de Dunkin Donuts tiene 178 miligramos y el de McDonald tiene 133 miligramos por taza. Esta cantidad de cafeína puede ser realmente perjudicial para la salud.
10. PUEDEN HACERSE IGUAL DE BIEN LOS CAFÉS EN CASA
Según David Rosengarten, autor de libros de cocina, casi todo el mundo “hace un café todos los días”. Por eso, hay que saber que nosotros podemos hacer nuestro propio café, igual de bueno que el Starbucks.
Según Rosengarten, hay que elegir granos que hayan sido tostados hace pocos días y no comprar demasiado. Las habas molida en casa, con un molinillo, dan un café mejor. Además, es necesario tener una buena cafetera que no contamine el sabor del oscuro líquido.
Y todo esto, ¿cuánto costaría? Si se toman 2 taza al día, no pasará de 5 dólares a la semana. Es cierto que las máquinas específicas son más caras pero durarán años.
Por el contrario, dos taza al día en Starbucks ascenderían a 1.400 dólares al año, en los que no están incluidos los desplazamientos hasta la tienda ni esas magdalenas o bollos que e probable que se consuman.
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