Las empresas del sector privado de Estados Unidos señalaron una "renovada expansión" en marzo, como se desprende del índice PMI compuesto que elabora S&P Global, que trepó hasta los 53,3 puntos desde los 50,1 registrados en febrero, y consigue afianzarse en terreno expansivo, mientras que el consenso esperaba que se mantuviera sin cambios en el tercer mes del año.
Según el organismo que difunde los datos, "la producción creció a un ritmo sólido que fue el más rápido desde mayo de 2022 a medida que mejoraron las condiciones de la demanda y volvió el crecimiento de nuevos pedidos". Tanto los fabricantes de productos como los proveedores de servicios incrementaron su producción en febrero, aunque fueron los últimos los que lideraron la mejora.
Los 53,3 puntos que alcanzó el indicador compuesto (que engloba a los sectores manufacturero y de servicios) suponen su registro más alto en casi un año, y "marcó una sólida expansión en la actividad del sector privado".
En líneas generales, los datos de marzo señalaron un regreso al crecimiento en los nuevos pedidos, que no pisaban terreno expansivo desde el pasado septiembre, y el aumento fue el más pronunciado de los últimos 10 meses. El repunte en las condiciones de la demanda se atribuyó a las compras de nuevos clientes y a la introducción de nuevos productos.
En el frente de los precios, el coste de los insumos que emplean las empresas siguió aumentando a un ritmo "históricamente elevado" en marzo, y las compañías señalaron que las mayores presiones salariales pesaron sobre el precio de los bienes intermedios.
Este encarecimiento de los insumos se traslado a los precios de venta, cuyo aumento "se aceleró a finales del primer trimestre", a una tasa de incremento que fue la más pronunciada de los últimos cinco meses.
EL SECTOR SERVICIOS
El índice PMI para el sector servicios registró 53,8 puntos en marzo, desde los 50,6 de febrero, lo que indica "una sólida expansión en la actividad empresarial", con una producción que aumentó a su mayor ritmo desde abril de 2022, gracias a unas "condiciones de demanda más sólidas y un aumento renovado en los nuevos pedidos".
Los precios de los insumos que emplea el sector volvieron a aumentar "notablemente" en marzo, mientras que "el poder de fijación de precios de las empresas se vio impulsado por las condiciones de demanda más fuertes, ya que aumentaron sus precios de venta a la tasa más alta en cinco meses".
La mayor producción y la mejora de la demanda impulsaron la creación de empleo, ya que la contratación en el sector servicios aumentó al ritmo más pronunciado desde el pasado septiembre.
EL SECTOR MANUFACTURERO
En lo que respecta a los productores de bienes, el índice PMI mejoró hasta los 49,3 puntos, desde los 47,3 de febrero, y se quedó a las puertas del terreno expansivo, después de que el sector experimentara "un ligero deterioro de las condiciones de operación" en marzo.
La tasa de disminución de la salud del sector fue la más lenta en la secuencia actual de cinco meses de deterioro, en medio de un "aumento renovado en la producción y una caída más suave de los nuevos pedidos".
La producción en el sector aumentó por primera vez desde el pasado octubre, y al ritmo más pronunciado de los últimos diez meses, debido a "una contracción menos marcada en las nuevas ventas". La disminución de los pedidos nuevos fue la más lenta en la secuencia actual de disminución de seis meses.
Las presiones inflacionarias en el sector manufacturero se suavizado en marzo, con unas tasas de incremento en los costos de los insumos y los cargos de producción que se desaceleraron, ya que las empresas notaron moderación en el costo de algunas materias primas.
Chris Williamson, economista jefe de negocios de S&P Global, indicó que "marzo ha sido testigo de un resurgimiento alentador de crecimiento económico, con las encuestas empresariales indicando una aceleración de la producción a la tasa más rápida desde mayo del pasado año".
"Sin embargo, el repunte es desigual y está impulsado en gran medida por el sector servicios. Aunque la fabricación alcanzó una pequeña ganancia de producción, esto fue principalmente un reflejo de las cadenas de suministro mejoradas, que permiten a las empresas cumplir con los pedidos pendientes de que se habían acumulado durante la pospandemia", agrega.
