Italia continúa añadiendo opciones sobre su futuro político y en casi todas ellas gana la Liga Norte. El partido del sol de los Alpes recibiría más del 20% de las papeletas en caso de nuevas elecciones, fortaleciendo su figura como líder de la derecha italiana e impacientando al Movimiento Cinco Estrellas para evitar las urnas. Por ahora, el presidente Sergio Mattarella guarda silencio a expensas de las conversaciones que mantienen los integrantes de la coalición 'anti-establishment'.
Carlo Cottarelli no presentó ni un solo ministro el martes y abandonó el Parlamento por la puerta de atrás. Un escenario que dio pie a especulaciones de que el ex miembro del Fondo Monetario Internacional podría estar ganando tiempo ante la dificultad de formar un Gobierno tecnócrata bajo el respaldo de sendas cámaras. Además, las conversaciones entre Di Maio y Salvini invitaban al candidato a echarse a un lado, quizás esta vez sí sean capaces de llegar hasta el final.
Así, tres escenarios principales se abrían en Italia: la consecución del Gobierno de transición de Cottarelli bajo el apoyo del Parlamento, aprobando los Presupuestos y extendiendo las elecciones hasta finales de año; un nuevo Ejecutivo fruto de la coalición 'M5S-Liga Norte' o elecciones en junio. Y de nuevo, todas ellas favorecen a los de Salvini.
Di Maio necesita el apoyo de la Liga para formar un Gobierno y su oferta ha ascendido hasta prescindir del anterior candidato a primer ministro, Giuseppe Conte. Ahora, el sucesor de Beppe Grillo ofrece la posibilidad de que Italia esté dirigida por un liguista, con las miradas apuntando a Giancarlo Giorgetti. Además, los expertos aseguran un acercamiento entre la coalición y los ultraderechistas de 'Fratelli di Italia', quienes respaldarían a Giorgetti y aumentarían el grupo de presión frente a Mattarella.
Sin embargo, el veto del presidente a Paolo Savona no ha gustado nada en las entrañas de la 'Padania', cuya intención de formar Gobierno pasa por mantener las mismas caras del anterior acuerdo. La propuesta de Di Maio se basa en mantener a Savona en el Ejecutivo pero fuera del ministerio de Economía. Una posibilidad que Salvini ya ha rechazado asegurando que su paciencia "se está acabando". "Sacar ministros porque no gustan a los alemanes, a los banqueros o a algún comisario europeo no me parece la mejor manera de empezar", apostilló.
Por ahora, el parqué de Milán se recupera de las pérdidas acumuladas de las tres últimas semanas, casi un 13%, y se apunta una subida de un punto. Además, la prima de riesgo italiana también se ha relajado estas últimas dos jornadas, y se sitúa por debajo de los 235 puntos, aunque todo es susceptible de cambiar en minutos dada la alta volatilidad que domina ambos mercados.
