La reforma con la que PSOE y Unidas Podemos pretenden restringir la capacidad del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) de nombrar jueces con el mandato caducado, como viene haciendo este órgano desde hace más de dos años, ha recibido este jueves el aval del Congreso. El dictamen de la Comisión de Justicia ha logrado un amplio respaldo, con 196 votos a favor, 150 en contra y una abstención. PP, Vox y Ciudadanos han rechazado la reforma. Ahora, el texto pasa al Senado, que previsiblemente le dará su aprobación definitiva en las próximas semanas.
La reforma ha recibido la luz verde del Congreso apenas dos semanas después de que PSOE y PP volvieran a fracasar en sus negociaciones para renovar el CGPJ. Tras el nuevo bloqueo, la institución ha retomado su actividad habitual y esta semana ha sacado adelante otros seis nombramientos de jueces para diferentes plazas con mayoría.
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Si el texto saliera adelante definitivamente en el Senado, a los miembros del CGPJ con el mandato caducado no se les permitiría proponer el nombramiento del presidente del Tribunal Supremo, los presidentes de las Audiencias Provinciales o los Tribunales Superiores de Justicia, entre muchos otros. Esas funciones, "legítimamente han de corresponder al CGPJ entrante o renovado y no al saliente", según entienden PSOE y Unidas Podemos.
La reforma que el Congreso ha aprobado este jueves pretende presionar al PP para que no tenga incentivos para seguir bloqueando la renovación del CGPJ. La norma, no obstante, no incluye la modificación de las mayorías necesarias para elegir a los integrantes del órgano, una propuesta que el PSOE sigue manteniendo congelada pese a que Unidas Podemos insiste en volver a ponerla en marcha por la cerrazón del PP.
Congreso y Senado seguirán necesitando mayoría de tres quintos para designar a los nuevos miembros del CGPJ, lo que implica que los populares seguirán siendo imprescindibles para la renovación, aunque la reforma se apruebe definitivamente dentro de unas semanas,
CIUDADANOS, PP Y VOX CONTRA LA REFORMA
El bloque conservador ha dejado claro este jueves su oposición frontal a la proposición de ley. Las intervenciones de los portavoces de Vox y Ciudadanos han cuestionado el "reparto de la tarta" que tradicionalmente han hecho PP y PSOE de los vocales del CGPJ. El diputado Vox, Javier Ortega Smith, ha atribuido la reforma al afán de los partidos del Gobierno de controlar a los jueces y de “colocar sus fichas” y ha defendido que sean los propios jueces los que elijan a los vocales de su órgano de gobierno.
El PP ha asegurado que la ley tiene una "pésima calidad legislativa". Los populares volvieron a pedir que la composición del CGPJ sea elegida por los propios jueces, pese a que cuando gobernaron no plantearon esta reforma, y han acusado al Gobierno de intentar hacerles "chantaje" con técnicas que demuestran sus "tics autoritarios".
