imagen-sede-central-banco-espana 0
Banco de España

La rentabilidad del bono español a 10 años ha marcado un nuevo mínimo histórico por tercer día consecutivo en el 0,017% antes de la reunión del Banco Central Europeo (BCE) y la subasta del Tesoro Público español, que prevé captar este jueves entre 750 y 2.250 millones de euros en su penúltima emisión del año.

El Tesoro ofrecerá a los inversores deuda a largo plazo para prácticamente culminar su programa de emisiones, en un ejercicio marcado por la crisis del Covid-19 que le ha llevado a realizar tres modificaciones en su previsión de emisiones.

La penúltima subasta del año se producirá después de que el Congreso respaldase por mayoría los Presupuestos Generales del Estado (PGE) el pasado jueves para remitirlos al Senado, donde llegaron ayer para continuar su tramitación parlamentaria.

El organismo afronta las últimas subastas de un año marcado por la crisis del Covid que le ha obligado a acometer en tres ocasiones cambios en su programa de financiación. De hecho, recientemente la vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, anunció una nueva reducción del programa de emisiones del Tesoro de este año en otros 5.000 millones de euros, por lo que la emisión neta se situará en 110.000 millones de euros en 2020.

En este contexto, este jueves ofrecerá obligaciones a 10 años, con cupón del 1,25%, y obligaciones a 10 años indexadas a la inflación, con cupón del 0,65%. La referencia para medir la evolución del coste de financiación es el tipo de interés marginal del 0,230% registrado el pasado 1 de octubre y el interés del -0,768% marcado en una emisión del 6 de agosto.

NO CONVOCA LA SUBASTA DEL DÍA 17

La emisión de este jueves será la penúltima del año, ya que tras la última reducción de emisiones de su programa, el Tesoro no convocará la subasta de bonos y obligaciones prevista para el jueves día 17, por lo que la última subasta del año será la del martes día 15 de letras a 3 y 9 meses.

A pesar de las consecuencias de la crisis del Covid-19 desde el mes de marzo, los inversores han mantenido su confianza en la deuda pública española, marcando mínimos en los tipos y reduciendo los costes hasta tasas históricos del 1,85%, en paralelo a un alargamiento de la vida media de la cartera, hasta los 7,82 años.

Noticias relacionadas

contador