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La avaricia de los inversores estadounidenses está disparada después de que Wall Street haya estado ampliando sus récords históricos, prácticamente, sesión tras sesión. Así lo indica el índice 'Fear and Greed', elaborado por la CNN, que ha alcanzado los 93 puntos sobre 100, su máximo nivel desde finales de 2017. Pero cuidado, porque es de sobra conocido que un exceso de complaciencia puede provocar la caída de los mercados.
De hecho, en los últimos cinco meses de 2017, el S&P 500 se revalorizó un 10%. Este crecimiento de dos dígitos exaltó la confianza de los inversores, que aún tuvieron tiempo de ver otro repunte del 5,5% en enero de 2018. Estos 'números verdes' desgastaron al índice estadounidense, que comenzó a caer hasta acumular un retroceso del 11% a finales de ese mismo año.
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Esta situación se explica al observar los cánones que ha seguido históricamente la bolsa. Los sabios del parqué, generalmente, siempre han apostado por las compras cuando el mercado tiene miedo; mientras que se han decidido por vender cuando cotizaban con alegría porque suelen entrar en juego inversores pocos sofisticados.
La marcha del mercado estadounidense en 2019 ha sido similar a la que se vivió hace justo dos años. Desde que comenzó septiembre, El S&P 500 acumuló una subida del 10% y todas las previsiones apuntan a que continuará esta tendencia alcista, al menos, durante el primer trimestre del año, impulsado por el acuerdo comercial de 'fase 1' alcanzado con China. Eso sí, las bolsas se vieron afectadas este viernes por el aumento de la tensión militar entre Irán y EEUU, lo que podría adelantar la corrección.
El índice 'Fear and Greed' está compuesto por siete indicadores. Todos ellos están en el nivel de "avaricia extrema", excepto el índice VIX, que mide la volatilidad de los mercados, y se sitúa justo por encima de su media de los últimos 50 días. Este indicador es muy útil para conocer en qué fase se encuentra una tendencia y poder tomar decisiones de compraventa.
