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Grupo San José obtuvo un beneficio neto de 18,1 millones de euros en 2018, lo que equivale a un incremento del 48,1% en comparación con el ejercicio precedente, cuando su resultado neto fue de 12,2 millones de euros, según las cuentas remitidas por la firma a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
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La facturación neta de la empresa entre enero y diciembre se situó en 758,4 millones de euros, cifra que fue un 11,1% mayor de la registrada en el mismo periodo de 2017. Por áreas geográficas, la facturación procedente del mercado español creció un 25,4% durante el año pasado, hasta los 372,9 millones de euros, mientras que los ingresos originados en el resto de mercados se mantuvieron estables en 385,5 millones de euros.
Por segmentos de negocio, la división de construcción se mantuvo como la principal, tras contabilizar unos ingresos de 675,9 millones de euros, un 12,5% más. En segundo lugar se situó la cifra de negocios procedente de las concesiones y los servicios, que avanzó un 6,6%, hasta los 50,8 millones de euros. Las actividades inmobiliarias y de desarrollos urbanísticos decrecieron un 44,4%, hasta los 3,7 millones de euros, mientras que la facturación de la división de energía cayó un 13%, hasta los 9,7 millones de euros.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de Grupo San José experimentó una mejora del 11,7% en comparación con el ejercicio precedente, hasta situarse en los 51,6 millones de euros. Esta cifra representa un margen del 6,8% sobre la cifra de negocio.
Asimismo, la empresa ha destacado que la posición neta de tesorería a cierre del ejercicio 2018 se situó en una caja positiva de 23,4 millones de euros, frente a los 66,7 millones de deuda financiera neta que había al cierre del año anterior.
