El presidente del Gobierno en funciones y candidato a la reelección, Pedro Sánchez, ha propuesto a las formaciones políticas un pacto para destinar el 5% del PIB español a la inversión en educación "con independencia de la coyuntura económica y de los gobiernos de los años sucesivos".
Durante su discurso en el debate de investidura que se celebra este lunes en el Congreso de los Diputados, Sánchez ha señalado la educación como una prioridad en su proyecto de "transformación" del país, que se asentará, según el presidente, "en una apuesta decidida por la educación y el conocimiento".
Asimismo, Sánchez ha anunciado que supone un objetivo real que "España se convierta en el primer país europeo que reconozca el derecho a la educación a lo largo de toda la vida para que el modelo educativo actual dé respuesta a los "nuevos tiempos". Según el presidente en funciones, el modelo actual se centra en la formación durante las dos primeras décadas de la vida, lo cual, ya no concibe como "útil" por la "permanente" necesidad de adquirir nuevas habilidades.
"Propongo un acuerdo que garantice que la inversión educativa sea del 5% del PIB con independencia de la coyuntura económica y de los gobiernos de los sucesivos años", ha dicho Sánchez en el hemiciclo. España destina el 4,2% de su PIB al gasto educativo, según los últimos datos recopilados por el Ministerio de Educación y Formación Profesional, correspondientes al año 2017. Sánchez muestra así la intención del gobierno en funciones de apostar por el conocimiento, la cultura y la ciencia, materias que según el líder del PSOE "impregnarán toda la acción del Gobierno".
En su discurso, Sánchez ha mencionado al joven alicantino Carlos Rodríguez, que logró la mejor calificación de Selectividad de este curso y estudiará Dramaturgia, como ejemplo del modelo educativo que propone. "Ha elegido lo que mueve sus sueños, y para eso está la educación, para sacar lo mejor que cada uno puede dar a la sociedad y a sí mismo", ha apostillado Sánchez.
Sánchez ha calificado la educación como la "base de la igualdad de oportunidades" prometiendo "una educación pública con recursos y vocación de excelencia" donde exista "material gratuito para el que lo necesite" y evite "esa lacra que es el abandono escolar temprano".
El candidato socialista a la presidencia del Gobierno ha asegurado que universalizará "la educación de 0 a 18 años" promoviendo una "oferta suficiente de plazas públicas" con una medida que ya figuraba en el acuerdo de Presupuestos Generales del Estado firmado el año pasado por el PSOE y Unidas Podemos: permitir a los ayuntamientos con superávit que inviertan en la construcción de escuelas infantiles.
"Vamos a apostar por la gratuidad desde las escuelas infantiles hasta la primera matrícula universitaria", ha proclamado Sánchez en el Congreso, prometiendo además una revisión "en profundidad" del sistema de becas con aumento de la dotación económica y más agilidad en la concesión de las ayudas "priorizando la situación económica de las familias". En opinión del presidente en funciones, "el rendimiento académico no solo depende del mérito sino también de las condiciones de partida de cada persona en la vida".
