Después de semanas de balances, la Comisión Nacional de Salud china continúa emitiendo informes diarios sobre los fallecimientos y afectados por el coronavirus. Este lunes la cifra ha ascendido a 908 muertos en China, dato al que hay que añadir la muerte de un hombre en Filipinas, por lo que el total son 909 muertes por la enfermedad.
De los 97 decesos, 91 han tenido lugar en la provincia de Hubei, cuya capital es Wuhan, epicentro del brote y que permanece en cuarentena de facto desde el pasado 23 de enero. Los seis casos restantes se han distribuido en Anhui (este, dos muertes), Jiangxi (este), Heilongjiang (noreste), Hainan (sur) y Gansú (centro-norte).
En cuanto a los contagiados, ya son más de 40.000 (40.171), de los que 6.484 son casos graves. China continúa incidiendo en el número de personas que han superado el coronavirus -3.281-, a pesar de que se ha cobrado la vida de más personas que las afectadas por el SARS de 2003.
El personal sanitario ha continuado realizando seguimiento médico a 399.487 pacientes que han estado en contacto cercano con los infectados, de los cuales 187.518 siguen en observación.
LAS FÁBRICAS AMPLÍAN SUS CIERRES
Este lunes deberían empezar a funcionar las fábricas y empresas que permanecen cerradas en China desde el arranque de las celebraciones del Año Nuevo Lunar. Sin embargo, muchas de ellas han decidido ampliar los cierres para evitar la extensión del coronavirus.
Incluso si los negocios vuelven a funcionar, está previsto que la mayoría de los trabajadores sigan desempeñando sus labores desde casa, en la medida de lo posible.
La semana pasada, más de 20 provincias y otras regiones dijeron a las empresas que no reanudaran el trabajo antes del 10 de febrero como muy pronto. En 2019, esas zonas de China representaron más del 80% del PIB nacional, y el 90% de las exportaciones, según los cálculos de CNBC.
