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Pedro Sánchez en la sesión de controlEUROPA PRESS

Moncloa se esfuerza en trasmitir el mensaje de que no tira la toalla con los Presupuestos, mientras desde Ferraz se da por sentado que no se podrán presentar unas cuentas que, sin apoyos, desgastarán al PSOE. La prórroga de los últimos Presupuestos Generales del Estado (PGE) del Gobierno de Mariano Rajoy parece más que segura, pero fuentes conocedoras de las negociaciones cuentan a 'Bolsamanía' que Pedro Sánchez esperará a conocer el resultado de las elecciones andaluzas para tomar una decisión.

Las mismas fuentes explican que dependiendo de los votos que obtenga la candidata socialista, Susana Díaz, el Gobierno iniciará una maniobra de acercamiento a Ciudadanos, con quienes prevé iniciar conversaciones "dependiendo de Andalucía". Baraja que si el resultado en las urnas no permite que el PSOE gobierne en solitario, la futura composición de la Junta en la comunidad autónoma puede ser una buena moneda de cambio para las cuentas.

No obstante, politólogos consultados advierten de los riesgos de este juego, ya que podría poner en peligro su acuerdo con Podemos. Desde Ciudadanos, la formación naranja mantiene su presión al Ejecutivo para que lleve su proyecto al Congreso y no dilate más los tiempos y su líder, Albert Rivera, dejó claro que no darán su apoyo. Pero los socialistas se aferran al hecho de que se han alineado con el partido de Sánchez para eliminar el veto del Senado sobre las cuentas estatales, por lo que no ven descabellado que acaben por avalar los PGE de Moncloa.

INDEPENDENTISTAS Y EL PNV

De fracasar la vía Ciudadanos y sólo con el respaldo de Podemos, se hace indispensable que el presidente del Gobierno cuente con los independentistas y con el PNV para que el trámite de su proyecto presupuestario pase el examen del Congreso. Por ahora, ya ha iniciado conversaciones con los nacionalistas vascos para adherirlos al consenso. Pero estos, por boca de su presidente, Andoni Ortuzar, han advertido de que no se "desgastarán" en una negociación que no tiene visos de prosperar por el rechazo de ERC y PDeCat a apoyar las cuentas de Sánchez.

La respuesta de ERC y el PDeCAT es de sobras conocida. Un rotundo 'no' a no ser que se libere a los líderes políticos del 'procés'. Pero fuentes parlamentarias explican a este medio que el presidente del Gobierno tiene "la esperanza como mínimo de conseguir la complicidad de ERC (con una abstención del PdCat parece que sería suficiente)". Como bazas cuenta con los 2.200 millones en inversiones pactados con la formación morada para Cataluña y con el reciente cambio de magistrados en el juicio del 'procés'.

En este caso es seguro que este acuerdo -si es que llega- sólo se producirá tras los comicios andaluces, por lo que cuentan con casi un mes de margen. "Al PSOE no le conviene ahora recibir el apoyo de los independentistas porque sería utilizado tanto por el PP cómo por Ciudadanos en plena campaña como una demostración del 'pacto entre Sánchez y los que quieren romper España'", aducen fuentes conocedoras. Por lo tanto los escenarios continúan siendo los mismos, esto si, en "pause" hasta la segunda semana de diciembre.

Al PSOE no le conviene ahora recibir el apoyo de los independentistas porque sería utilizado tanto por el PP cómo por Ciudadanos en plena campaña andaluza

"Instamos a los partidos independentistas a reflexionar, a hacer alta política, y esto supone poner por delante de cualquiera otro interés el bienestar del conjunto de la población", señala el diputado del PSC, Raúl Moreno. Y afea que no sean capaces ni "por una vez en los últimos 8 años", de "priorizar la mejora de las condiciones de 1,6 millones de catalanes pensionistas o de los 160.000 ciudadanos que esperan mejoras en la ley de dependencia".

PRÓRROGA MÁS QUE SEGURA

La oposición de Ciudadanos y republicanos, aboca a Sánchez a una prórroga. En este contexto, explican fuentes parlamentarias "parece descartado que la no aprobación de los presupuestos venga acompañada de una convocatoria de elecciones". "O se presentan para fracasar y escenificar el poco compromiso del resto de partidos para solucionar los grandes temas sociales, o directamente no se presentan, para evitar el desgaste de evidenciar la pérdida de espaldarazo parlamentario", explican a este medio.

Y con el presupuesto de Rajoy prorrogado, lo que sucederá en cualquier caso a partir del 1 de enero de 2019, el Gobierno aún tendrá capacidad para sacar adelante ciertas medidas por decreto ley y a través de ampliaciones determinadas de crédito. Así se podría recuperar los subsidios de desempleo para los parados de más de 52 años y las ayudas a la dependencia, o incrementar las pensiones o el sueldo de funcionarios, por citar sólo algunos ejemplos.

Todas estas medidas, además, se identificarían como acciones impulsadas en exclusiva por el Gobierno, que podría rentabilizar electoralmente y sin compartir el rédito con ninguna otra fuerza, como ocurre en el caso de una negociación presupuestaria en la que hay que hacer cesiones, como ha ocurrido en el acuerdo alcanzado con Unidos Podemos.

La posibilidad de sacar adelante algunos de los punto principales de ese pacto, aún sin nuevos Presupuestos, la admitió el propio Sánchez en rueda de prensa el pasado 7 de noviembre cuando avanzó que, si no conseguía aprobar los Presupuestos, intentaría desarrollar algunos de ellos vía aprobación de reales decretos leyes. De hecho ya ha anunciado que el aumento del Salario Mínimo Interprofesional a 900 euros lo aprobará por real decreto ley antes de que termine el año para que esté en vigor el 1 de enero.

La incógnita sobre los Presupuestos se despejará en cualquier caso este mes de diciembre. El Gobierno, dijo Sánchez el miércoles en sede parlamentaria, trabaja para remitirlos al Congreso antes de que acabe el año.

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