El Banco de la Reserva de Nueva Zelanda (RBNZ) ha mantenido este miércoles la tasa oficial de efectivo en el mínimo histórico del 1,75%, pero ha revisado su perspectiva a la baja al indicar que el próximo movimiento en las tasas de interés probablemente será un recorte de tipos.
"Dada la perspectiva económica mundial más débil y el menor impulso en el gasto interno, la dirección más probable de nuestro próximo movimiento de tipos oficiales es a la baja", dijo el gobernador Adrian Orr en el comunicado que acompañó a la decisión política.
La declaración del miércoles redobló el discurso acomodaticio de la declaración de política monetaria anterior, en la que se reflejaba que el RBNZ esperaba mantener los tipos estables hasta 2020. La decisión ha tomado al mercado por sorpresa y ha provocado caídas en el dólar neozelandés de un 1,6% contra el dólar de EEUU.
Este comunicado llega en un contexto de un claro giro acomodaticio en los principales bancos centrales, después del aplazamiento de las subidas del precio del dinero del Banco Central Europeo y del frenazo en la normalización de la política monetaria de la Reserva Federal de EEUU (Fed).
