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Tras el Black Friday, llega otra cita marcada en el calendario para las compras: el Cyber Monday. Un lunes en el que los descuentos se centran exclusivamente en las compras online. Más de la mitad de los españoles planea aprovechar las ofertas este año, pero hay que tener cuidado, ya que pese a buscar el ahorro muchos acaban derrochando. Estas son algunas recomendaciones.

Con el objetivo de que los consumidores extremen las precauciones y no sufran ninguna ciberestafa, desde Asufin dan estos consejos. En cuanto al pago, aclaran que existe una gran variedad de formas de pago seguras. Ante esto, evita el pago con tarjeta de crédito y utiliza tarjeta prepago, monedero, de débito o incluso PayPal. Si usas tu tarjeta de crédito habitual recuerda eliminar los datos antes de abandonar la página web.

Antes de comprar recuerda comprobar que la URL de la página web comienza con la expresión 'https' y tiene un candado cerrado en el lado izquierdo. Así se garantiza que tu información está cifrada y tus datos están protegidos. Otras señales que confirman la autenticidad de la página es que contenga información sobre la protección de datos y que se detallan todos los términos y condiciones.

Si es la primera vez que compras en esa web y no la conoces, lo recomendable es revisar cuáles son las opiniones de otros usuarios online. Ya que lo más probable es que si la página web no es de fiar otros usuarios lo hayan avisado en las reseñas. Cuidado con los precios milagro: Aunque el Black Friday y el Cyber Monday son días de promociones, debemos de tener cuidado con las promociones demasiado buenas para ser verdad, pues cabe la posibilidad de que sea una estafa y no te llegue el producto, o sea falso o no posea las condiciones prometidas. Además, recuerda que si la empresa está adherida a algún distintivo de calidad o sistema de resolución de conflictos reconocido oficialmente ya que más probable que puedas recuperar tu dinero en caso de estafa.

OJO A LOS TRUCOS

El Cyber Monday es el día perfecto para hacer acopio de todos los regalos navideños a un precio reducido. Pero ¡ojo, que tiene truco!, avisan desde Raisin. Por ello, recomiendan apuntar lo que necesitas comprar, ya que es muy fácil lanzarse a las ofertas y acabar comprando cosas que no necesitamos. También fíjate si realmente merece la pena el precio. Que un producto se venda a un precio menor que normalmente no quiere decir necesariamente que sea el más barato del mercado. Compara precios con otras páginas web o establecimientos.

¡Cuidado con las ofertas! Asegúrate de que el precio ha bajado realmente y de que no te vendan una "oferta" al mismo precio. Para las compras online, puedes utilizar herramientas como la de Verificador de ofertas. Además, ten en cuenta que muchos de los productos rebajados durante este día tienen un stock limitado, así que recomendamos tener una cesta de la compra lista y simplemente darle a 'comprar' cuando se aplique el descuento.

ENTRE 100 Y 300 EUROS

Avisos similares son los que lanzan desde el comparador de finanzas Acierto.com, que estiman que, de media, gastaremos entre 100 y 300 euros este Black Friday 2021, un importe muy similar al del año pasado. En cuanto a la manera de comprar, hasta el 62% de los consumidores prefiere adquirir los productos online. La rapidez, facilidad de la compra y la posibilidad de comparar en la red son algunas de las principales razones para hacerlo.

Sin embargo, en este punto llama la atención un dato: a pesar de que el comprador online suele tener un comportamiento más meditado, no ocurre lo mismo durante esta fecha. Según sus cálculos, hasta tres de cada cinco consumidores comprarán de forma impulsiva. Algo que parece indicar que nos dejaremos llevar por las ofertas. Además, solo el 20% cuestiona su autenticidad.

En este sentido, recomienda planificar las compras: será fundamental para no comprar de más. Es importante analizar qué necesitamos exactamente y fijar un presupuesto realista. Esto quiere decir, que permita cubrir las compras y que se adapte a la realidad de la economía familiar en ese momento. También informarse de cuándo empiezan los descuentos: directamente relacionado con el punto anterior, es fundamental informarse de cuándo empiezan los descuentos de cada marca. Algunas los adelantan unos días y es posible que el producto se agote antes de que podamos comprarlo.

Analizar la política de devoluciones de la compañía es también importante, sobre todo lo relativo al plazo y formas para reclamar, a si deberemos pagar los gastos de envío de la devolución, si permiten entregar el paquete en algún punto de recogida, etcétera. Utilizar una tarjeta con un importe fijo es otra práctica recomendable. Es decir, dejar un dinero que se ajuste al presupuesto en una tarjeta que solo usaremos para el Black Friday. Es una forma de no gastar de más. La mayoría de apps de la banca online permiten hacerlo sin demasiadas complicaciones.

Comparar los precios en varias plataformas puede ahorrarnos también hasta un 50%. En estos casos es importante pararse a pensar y no dejarse llevar. Utilizar herramientas de monitorización de precios: el mercado ofrece aplicaciones específicas que permiten comprobar si los descuentos son efectivamente reales o se ha modificado el precio. Para hacerlo, controlan los importes a lo largo del tiempo.

Financiar, ¿una buena opción? Otra posibilidad para aprovechar los descuentos sin pasar apuros es recurrir a la financiación. Se trata de una buena opción si en el momento actual (con la paga extra todavía por llegar y a final de mes) no nos viene bien adelantar las compras de Navidad. En tal caso podemos recurrir a diferentes vías de financiación: utilizar una tarjeta de crédito, pedir un adelanto de nómina o recurrir a un préstamo rápido.

La tarjeta de crédito es la opción más conocida y flexible. La mayoría de bancos, además, no cobran intereses por aplazar el pago a final de mes. Otras de sus ventajas son que permiten establecer límites de gasto, que tienen servicios de alerta de fraude, seguros específicos, etcétera. En cuanto al adelanto de nómina, es algo que podemos solicitar a nuestra empresa o a nuestro banco. Si lo hacemos a este último, lo habitual es que nos pidan cierta antigüedad y tener contratado algún producto más. En cualquier caso, la concesión del dinero suele ser rápida, pues el banco ya nos conoce como clientes. Por último, también podemos pedir un préstamo rápido, un producto cuya concesión tarda entre 15 minutos y 48 horas. Los importes habituales en este tipo de préstamos suelen rondar entre los 300 y los 500 euros, aunque dependerá de cada caso en particular.

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