- El total de créditos dudosos cayó en junio hasta 122.508 millones de euros, 3.689 millones menos que en el mes anterior
- La morosidad de la banca se ha reducido 4,16 puntos porcentuales respecto al máximo histórico de diciembre de 2013
La morosidad de los créditos concedidos por las entidades bancarias (bancos, cajas y cooperativas) a particulares y empresas ha bajado al 9,44% en el mes de junio, por lo que este indicador sigue descendiendo hasta situarse ya en mínimos desde mayo de 2012, según los datos publicados este jueves por el Banco de España.
La cifra total de créditos dudosos ha descendido por tanto en junio hasta los 122.508 millones de euros, 3.689 millones menos que el mes anterior, el nivel más bajo desde junio de 2011. Esta cifra lleva incluido el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que ya no son considerados dentro de la categoría de entidades de crédito. De esta manera, la morosidad se sitúa por cuarto mes consecutivo por debajo de las dos cifras.
La morosidad de la banca se ha reducido 4,16 puntos porcentuales respecto al máximo histórico registrado en diciembre de 2013, que llegó a marcar el 13,6%. Esta caída de la mora se ha producido a pesar de que el crédito global del sector se elevó en junio un 1,2%, llegando hasta 1,298 billones de euros en total.
La cifra de créditos morosos exclusiva de las entidades de depósito llegó a 118.159 millones de euros, la cifra más baja desde el año 2010. Esta cifra fue de 121.865 millones en mayo y de 129.979 el pasado diciembre.
LA REDUCCIÓN DE CRÉDITOS SIGUE SU CURSO
No obstante, la tendencia de reducción del crédito sigue vigente en cuanto a los términos interanuales y baja un 4,4%. Sin incluir datos metodológicos, la ratio de morosidad se colocaría en el 9,63%, ya que el saldo de crédito bajaría hasta 1,271 billones. Las entidades financieras han rebajado sus provisiones respecto al mes anterior en 2.796 millones, en línea con el la morosidad, hasta situarse en 71.875 millones, cuando hace un año este dinero llegaba a 89.529 millones.
"El descenso del saldo vivo de préstamos desde las entidades de depósito contrasta con el aumento del nuevo crédito, lo que refleja el proceso de ajuste de la deuda por parte del sector privado. Y en el caso de las grandes empresas, la diversificación de las fuentes de financiación favorecidas por las medidas monetarias excepcionales (pero también limitadas en el tiempo) desde el BCE", ha asegurado el portavoz de la Asociación Española de Banca, José Luis Martínez Campuzano.