La economía británica creció en noviembre un 0,9%, muy por encima de lo esperado, superando por fin su tamaño justo antes de que el país entrara en su primer confinamiento por el Covid-19, según ha informado este viernes la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS).
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La quinta economía más grande del mundo fue un 0,7% mayor que en febrero de 2020, dijo la ONS.
De esta manera, el sector servicios y la construcción se situaron en noviembre un 1,3% por encima del nivel prepandemia, mientras que en el sector de producción la actividad aún era un 2,6% inferior a febrero se 2020.
"La economía creció con fuerza en el mes anterior a Ómicron", ha señalado el economista jefe de la ONS, Grant Fitzner, quien destacó el buen comportamiento de la construcción, tras varios meses de debilidad, al resultar más fácil conseguir muchas materias primas.
La ONS indicó que, si no hay revisiones de los datos, el PIB del cuarto trimestre de 2021 alcanzará o superará su nivel anterior a la pandemia (cuarto trimestre de 2019) siempre que la estimación mensual de crecimiento del PIB en diciembre de 2021 no caiga más del 0,2%.
Es propbable que el PIB sufra un retroceso temporal debido a Ómicron, afirma el economista jefe de Capital Economics para el Reino Unido, Paul Dales. El rendimiento de la economía fue impresionante en noviembre, pero el endurecimiento de las restricciones, las ausencias del personal por enfermedad o aislamiento y la mayor cautela de los consumidores probablemente hayan afectado a la actividad, señala Dales.
"Los recientes indicios de que la ola de Ómicron está empezando a remitir sugieren que el PIB probablemente repuntará en febrero y marzo", añade el economista. A partir del 1 de abril, se espera que una fuerte subida de los impuestos y de los precios de los servicios públicos lastre la recuperación durante el resto del año, afirma Dales.
