La inflación anual de la zona euro marcó récord en marzo al dispararse hasta el 7,4%, frente al 5,9% de febrero. Un año antes, la tasa fue del 1,3%, según las cifras publicadas por Eurostat, la oficina estadística comunitaria. Por su parte, en toda la Unión Europea (UE), la inflación aumentó al 7,8%, frente al 6,2% del mes previo y al 1,7% de hace un año.
El dato definitivo de marzo de la eurozona supone una rebaja de una décima respecto al avance que a principios de abril publicó Eurostat. Aún así, supone el mayor encarecimiento de los precios en la región del euro de toda la serie histórica.
En marzo, la mayor contribución a la tasa de inflación interanual de la eurozona provino de la energía (+4,36 puntos porcentuales), seguida de los servicios (+1,12), alimentación, alcohol y tabaco (+1,07) y bienes industriales no energéticos (+0,9 puntos).
Por países, las tasas anuales más bajas se registraron en Malta (4,5%), Francia (5,1%) y Portugal (5,5%), mientras que los registros anuales más altos correspondieron a Lituania (15,6%), Estonia (14,8%) y Chequia (11,9%). Respecto a febrero, la inflación anual descendió en dos Estados miembros y aumentó en 25.
Si se excluye del cálculo el impacto de la energía, la tasa de inflación interanual de la zona euro se situó en el 3,4% en marzo, mientras que la tasa de inflación subyacente alcanzó también un máximo histórico, al subir al 2,9%.
