Carmen Calvo, la ministra de Igualdad de España, ha asegurado que están dispuestos a tramitar por vía urgente una ley para que las mujeres tengan más poder en las empresas. Calvo ha explicado que esta ley no será de debate, sino de hechos y soluciones. Cree que el poder de las mujeres en las empresas debe ser normal en una sociedad democrática.
La también vicepresidenta del Gobierno de España ha explicado que la Ley de Igualdad Laboral, que ya está registrada en el Congreso, no solo luchará por cerrar la brecha salarial, sino también por la obligación legal de que las mujeres ocupen puestos de relevancia. Según indica Calvo, en España hay una ley de este tipo que "invita pero no obliga" a las empresas a exigir la presencia femenina en los lugares de poder y liderazgo.
La ministra ha recordado que este lunes el estado de California en EEUU tomó la decisión de exigir por ley la presencia de mujeres en los puestos de dirección, "siguiendo la estela de algunos países europeos". En el caso de España, Calvo ha señalado que, una vez aprobada esta ley, se pretende dar un periodo transitorio a las empresas para que se adapten a esta obligación.
En general, esta proposición de Ley (que según Calvo empezará "pronto" a tramitarse) está dirigida a "afrontar de manera global todos los problemas de discriminación laboral de las mujeres", como es el acceso al trabajo, la compatibilidad de la maternidad y el empleo o la corresponsabilidad de la vida personal y laboral, así como para resolver el "problema" de la brecha salarial.
"Esto no puede ser un asunto de debate, tiene que serlo de hechos y, por tanto, de soluciones normales en una sociedad democrática"
"Esto no puede ser un asunto de debate, tiene que serlo de hechos y, por tanto, de soluciones normales en una sociedad democrática donde las mujeres trabajadoras necesitamos que las respuestas justas sean eficientes", ha dicho.
Estas declaraciones las ha hecho en su intervención en el Forbes Women Summit, el debate definitivo sobre liderazgo femenino en el que también ha intervenido mujeres de primer nivel empresarial. Marieta del Rivero, consejera independiente de Cellnex, ha señalado que cree en las cuotas, pero “no son suficientes”. Por ello considera necesaria educación desde los niveles más altos.
Una afirmación con la que ha coincidido Marieta Jiménez, consejera delegada de Merck España, quien ha señalado que antes no creía en esas cuotas, pero ha asegurado que ahora sí que cree en ellas, porque es conscientes de los problemas a los que se enfrenta la mujer en su vida laboral.
Por su parte, Paloma Real, directora general de España, ha explicado que en este proceso de cambio también tienen que estar involucrados los hombres y que las medidas de conciliación también les tienen que beneficiar a ellos. “No hay que ponerse límites, hay que intentar llegar siempre a las metas”, ha apuntado.
En el foro también ha participado Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, quien ha asegurado que creen que los signos de los tiempos “son muy claros: el dar la igualdad de oportunidades a las mujeres y apoyarlas en todos los aspectos para desarrollar su vida laboral y familiar en condiciones de igualdad es absolutamente justo”.
Galán ha hecho hincapié en la apuesta de Iberdrola por el deporte femenino a través del patrocinio de 16 federaciones a las que están afiliadas 20.000 deportistas. “Las chicas que se han dedicado al deporte han sido siempre marginadas”, ha lamentado el presidente de Iberdrola Galán, quien puso como ejemplo la situación de la selección española femenina de hockey hierba, que no tenía dinero para ir a jugar el mundial en Holanda y consiguieron terminar en tercera posición.
Sobre la posición de la mujer en el mundo de la energía, admitió que todavía están en minoría, pero atribuyó esta situación a la escasez de ingenieras, por lo que instó a las mujeres a estudiar este tipo de carreras. Por último, destacó algunas políticas de igualdad implantadas en Iberdrola, como los 15 días de libranza antes de dar a luz, el año de excedencia o que se garantice el puesto durante cuatro años a las mujeres que tienen un hijo, todo ello junto a la implantación de la jornada intensiva.
