3757745857 ea6cb98cf8 o
Bandera de Alemania. Pixabay

Alemania vuelve a preocupar. El coloso de la Eurozona ha presentado unos datos macro débiles. Su balanza comercial no ha estado a la altura de lo esperado (18.100 millones frente a los 18.600 previstos). Tampoco sus datos de importaciones y exportaciones. El país germano sufre y el fantasma de la desaceleración económica se hace más fuerte.

Volviendo a las exportaciones e importaciones. Las primeras acumulan ya un descenso del 8% en lo que va de año. Las segundas, repuntaron un 0,5% en junio frente al -0,5% registrado en mayo gracias al impulso de la fuerte demanda interna del país. Cabe recordar que una lectora inferior al consenso es bajista para el euro.

Llueve sobre mojado para Alemania. Este jueves su producción industrial sufrió su mayor caída desde 2009. En comparación con el mes de mayo, este dato ha registrado en junio una caída del 1,5%, después de subir un 0,1% el mes anterior.

La producción industrial alemana sin contar con la energía y la construcción registró en junio un retroceso del 1,8%.

En el caso de la producción de bienes intermedios se registró una bajada del 2%, mientras que la producción de bienes de capital retrocedió un 1,8% y la de bienes de consumo un 1,4%. Por su parte, la producción de energía experimentó una caída del 1,6% en junio, mientras que la producción del sector de la construcción se incrementó un 0,3%.

"Calificaríamos el informe de producción industrial como devastador, sin un lado positivo", señala Carsten Brzeski, economista jefe de ING Alemania, para quien los datos muestran la necesidad de prepararse "para la contracción de la economía alemana en el segundo trimestre, a menos que las exportaciones traigan una sorpresa inesperada".

Noticias relacionadas

contador