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La canciller alemana Angela Merkel ha intentado convencer a los legisladores de su páis que el Fondo Monetario Internacional tomaría parte en el nuevo rescate a Grecia. Esto se ha llevado a cabo antes de una votación parlamentaria en la que muchos de sus socios de caracter conservador hayan rechazado esta ayuda a los helenos.

Merkel en sus primeras declaraciones públicas, según ha informado Reuters, señaló a la cadena alemana ZDF que estaba convencida de que la directora gerente del FMI, Christine Lagarde aseguraría la participación del organismo si se cumplían las condiciones de reforma del sistema de pensiones y el desahogo de la deuda griega.

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"La señora Lagarde, la jefa del FMI, dejó muy claro que si se cumplían esas condiciones, ella le recomendaría al (...) Fondo tome parte en el programa a partir de octubre", señaló la mandataria alemana y añadió: "No tengo dudas de que lo que la señora Lagarde dijo se hará realidad", subrayó.

"La señora Lagarde, dejó muy claro que si se cumplían esas condiciones, le recomendaría al Fondo que tome parte en el programa a partir de octubre", señaló Merkel

El desconocimiento sobre el posicionamiento del Fondo Montario Internacional ante el millonario rescate a Grecia, de 86.000 millones de euros, es una situación complicada para Merkel ante la votación de este próximo miércoles en el Bundestag.

Según ha publicado la agencia de noticias. los legisladores del partido de la canciller, la Unión Demócrata Cristiana de Alemania y del partido bávaro Unión Social Cristiana, optan por la participación del FMI debido a la reputación rigurosa de la que goza el prestamista. Sin embargo, Lagarde ha señalado que esperará hasta octubre para decidir si va a participar o no en el mismo.

Cabe destacar que Angela Merkel ya descartó cualquier tipo de quita a la deuda de Grecia pero sí que hizo hincapié en que existían otras maneras de proporcionar seguridad y alivio ante la extensión de los vencimientos y reducción de los intereses de la propia deuda. Además, Schaüble señaló en una entrevista al Deutsche Welle este sábado que todavía existía algo de margen para alargar las fechas de vencimiento de la deuda helena.

Aunque a Merkel este asunto con el FMI le esté costando algún dolor de cabeza, la aprobación de su país parlamentaria ante el rescate griego no está en duda debido a que se espera el voto a favor de los socialdemócratas y los verdes. Los que ahora le resultan problemáticos son sus aliados: 65 legisladores conservadores se plantaron contra la decisión de la canciller el mes pasado expresando su contrariedad a apoyar las negociaciones sobre el rescate.

Así, cabría destacar que el diario alemán Bild ha publicado este sábado que incluso hasta 120 miembros conservadores del Bundestag podrían negarse a apoyar el rescate europeo a el país de Tsipras.

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