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Rebotes puntuales aparte, lo cierto es que todo apunta a que el título ataque el único soporte que presenta en el momento actual: los 1,63 euros que se marcaron en mayo de 2013.
La banca doméstica es la que está siendo especialmente castigada en los últimos meses, aunque ante todo cabe decir que el movimiento es sectorial. Es decir, son los bancos del Viejo Continente los que están cayendo con fuerza. Se trata de un movimiento en bloque. Y dentro de esta avalancha vendedora los hay que aguantan un poco mejor que otros. Pero no es el caso de Bankia, que le tenemos a las puertas de los mínimos históricos en los 1,63 euros. Por lo pronto, recientemente ha perforado los mínimos del Brexit (1,901) y, rebotes aparte, todo hace pensar que más pronto que tarde ataque los 1,63 euros, que son los mínimos históricos que marcó en mayo de 2013. Por debajo se colocaría en caída libre absoluta, con las implicaciones bajistas que ello casi siempre para cualquier subyacente en la misma situación.
