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Las diferencias entre Podemos Andalucía y la dirección nacional del partido continúan. La dirección nacional del partido ha decidido rebajar las exigencias a Susana Díaz para permitir su investidura, mientras que los andaluces se niegan a hacer estas concesiones.

“Si no cumple las condiciones, se vota no”, han señalado fuentes de la rama andaluza de Podemos en declaraciones al diario El Mundo. En la formación autonómica ven como “irrenunciables” las medidas que ha puesto sobre la mesa el PSOE, algo que Teresa Rodríguez está dispuesta a defender, incluso desafiando a la dirección del partido.

La semana pasada, Rodríguez ya mostró una postura contundente, salvo que el PSOE de Susana Díaz aceptara una serie de exigencias. Pero el lunes la dirección nacional de Podemos desautorizó a la gaditana.

En una rueda de prensa celebrada en Madrid, la cúpula del partido rebajó el tono de las medidas propuestas a Susana Díaz a cambio permitir su renovación como presidenta de Andalucía tras las elecciones del pasado 22 de marzo. De este giro se desprende un cambio de postura de la cúpula, más favorable a la abstención que al voto en contra. El PSOE necesita la abstención de Podemos, PP o Ciudadanos para que Díaz pueda ser investida con mayoría simple.

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LAS LÍNEAS ROJAS DE TERESA RODRÍGUEZ

En Podemos hay voces radicalmente en contra a permitir la renovación del PSOE al frente de la Junta de Andalucía si no garantiza primero una serie de compromisos. Tras pactar una lista de temas con los diputados electos de Podemos, Teresa Rodríguez pidió tres medidas a los socialistas a cambio no votar en contra: dimisión de Chaves y Griñán por el caso de los ERE irregulares, no contratar con bancos que desahucien a personas sin alternativa o la reducción de altos cargos y asesores a cambio de la readmisión de personal educativo y sanitario despedido por los recortes.

"Podemos sigue estando abierto a entenderse y a dialogar con todo el mundo"

Frente a estas propuestas, la secretaria de Coordinación Ejecutiva de Podemos, Ángela Ballester, aseguró que “no hemos establecido ninguna línea roja. Podemos sigue estando abierto a entenderse y a dialogar con todo el mundo”, e insistió en que el partido no ha puesto “condiciones”.

En contra de los principios que defendía en un primer momento la formación que lidera Pablo Iglesias, ahora no es indispensable que el PSOE acepte sus propuestas. “No tenemos decidido si una propuesta o media”, respondió Ballester al ser preguntada sobre a qué debería comprometerse Susana Díaz para esquivar el voto el contra en la investidura.

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CAMBIO POR SORPRESA

El cambio de postura de la dirección nacional cogió por sorpresa al partido en Andalucía y a su líder. Además, Rodríguez estaba en ese momento de viaje tras la campaña electoral. La candidata de Podemos protestó a través de Twitter con un mensaje que retaba a la dirección nacional: "No facilitaremos un gobierno que vaya en contra de los andaluces. Éstas son nuestras tres condiciones para dialogar".

El número dos de la formación política, Íñigo Errejón, intentó rebajar la tensión el lunes. En un acto en Madrid, Errejón aseguró que era “muy difícil” llegar a un entendimiento con el PSOE. Así descartó el voto a favor pero no entró en el debate de la aceptación de las exigencias para descartar el voto en contra.

También está en juego la autonomía del grupo parlamentario, que es a quien corresponde votar. Desde la cúpula se ha negado que esto sea una intromisión, aunque desde Madrid se están siguiendo muy de cerca los primeros pasos en Andalucía.

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