La tasa de morosidad de entidades de crédito y EFCs cae tres puntos hasta el 10,25% durante 2017

Los préstamos de las entidades españolas a empresas representaron un 47% del total del crédito concedido en nuestro país, con la cifra de créditos morosos significando el 62% de la cifra total de morosidad. La morosidad en los créditos a familias también bajó durante el año pasado, finalizando en niveles del 5,4%.

En términos trimestrales, la tasa de morosidad de la banca nacional cayó de octubre a diciembre hasta el 7,79%, frente al 9,11% registrado en el mismo periodo de 2016.

"Es cierto que el saldo vivo de financiación empresarial a empresas y familias siguió a la baja en 2017, aunque a ritmos ya muy moderados. Esto contrasta con el fuerte crecimiento del nuevo crédito, especialmente a pymes. La nueva financiación, imprescindible para el crecimiento, genera un círculo virtuoso que facilita el descenso de la morosidad y reafirma el comportamiento responsable de la banca en la gestión de crédito", explicaba José Luis Martínez Campuzano, portavoz de la AEB, a través de un comunicado de la propia Asociación.

"La bajada de la tasa de morosidad se explica, no sólo por el obvio aumento de la capacidad financiera de muchas empresas y particulares con créditos pendientes si no porque se ha experimentado un importante incremento del crédito al consumo. Las importantes restricciones impuestas a día de hoy por las entidades financieras a la hora de conceder créditos provocan que el grueso del capital prestado cuente con una calificación mucho más alta que la media del capital vivo existente", apuntaba Javier Urones, analista de XTB.