La Comunidad de Madrid ampliará desde este viernes el número de clientes que pueden reunirse en las terrazas a seis personas, mientras que el límite de cuatro comensales en el interior de los establecimientos sigue en pie. Además, el gobierno madrileño obligará a los comensales a llevar en todo momento la mascarilla tanto dentro como fuera del bar o restaurante salvo para comer y beber.
No obstante, el horario de cierre de los comercios y la hostelería continúa fijado a las 21 horas, aunque se permite la entrega de comida a domicilio hasta las 00.00 horas.
La Comunidad mantendrá, por tanto, el toque de queda a las 22 horas debido a la situación epidemiológica de la región, que actualmente tiene una incidencia acumulada de 888 casos por cada 100.000 habitantes, según datos más recientes del Ministerio de Sanidad.
Por otro lado, se establece que se deberá asegurar la correcta ventilación de los establecimientos, tanto por medios naturales como mecánicos, pasando de recomendación a obligación. Para dar a conocer las medidas al sector, la Consejería de Sanidad ha repartido información como 'La Guía para Ventilación de Establecimientos de Hostelería', disponible en la web de la Comunidad de Madrid.
NUEVOS CONFINAMIENTOS
Como cada viernes, en la rueda de prensa semanal, la Comunidad de Madrid ha comunicado la detección de cinco casos sospechosos de la cepa brasileña y uno de la sudafricana. Así lo ha anunciado el viceconsejero de Salud Pública, Antonio Zapatero, en la actualización de la situación epidemiológica de la región.
Dentro de la estrategia del gobierno regional de actuar en las zonas con mayor transmisión del virus, la Consejería de Sanidad ha decidido confinar cuatro nuevos municipios: Colmenar Viejo, Camarma de Esteruelas, Villaconejos y Estremera, y las Zonas Básicas de Salud de Colmenar Viejo y El Pozo del Tío Raimundo, en Puente de Vallecas. De esta forma, las restricciones afectarán ya a más de 1,9 millones de madrileños, que suman el 29% de la población y el 32% de los contagios.
Zapatero ha reconocido que la comunidad ha experimentado "un cambio de tendencia", al disminuir esta semana el número de casos, registrándose un 16% menos siete días antes, dato que ha calificado de "muy positivo". No obstante, ha avisado que la incidencia "es todavía elevada" y el nivel de transmisión "sigue siendo alto".