• Bale cuajó una gran primera parte y dio la asistencia del primer gol
  • Casillas solventó bien dos llegadas sevillistas en la primera mitad
  • El Real Madrid conquista su segunda Supercopa después de la conseguida en 2002
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Cristiano Ronaldo ha demostrado que sigue igual de imparable que terminó la pasada campaña y ha llevado en volandas al Real Madrid hacia su segunda Supercopa de Europa. Dos grandes goles, el primero a pase de Bale que jugaba en su ciudad, fueron lo mejor del encuentro junto a un sensacional Kroos, que ya ejerció de centrocampista total.

La primera parte nos dejó un buen intercambio de golpes entre ambos equipos, que poco a poco se fueron animando en ataque. A estas alturas de la temporada sorprendió la gran adaptación que tuvieron tanto James como Kroos. El primero más pegado a la banda de lo habitual en su etapa en el Mónaco, se mostró activo en los centros, como uno que remató Bale y que a punto estuvo de acabar en gol, pero se diluyó en la segunda parte, fuera de su zona de influencia.

Por su parte el alemán fue la manija del equipo en el centro del campo. Siempre bien posicionado y siempre eligiendo la mejor opción de pase. Le acompañó un Modric que también demostró no haber perdido ni un ápice de su exquisita calidad técnica y que terminó con sobresaliente el primer test oficial de la temporada.

La gran actuación de Beto volvió a ser de lo más positivo del Sevilla, como ya ocurriera en la final de la Europa League ante el Benfica. En esta ocasión repelió a la perfección un disparo de Cristiano Ronaldo, que avisó antes de inaugurar el marcador en el minuto 30, tras un centro magistral de Bale. El portugués llegó con ventaja al segundo palo y se lanzó con fe para mandar el balón al fono de las mallas de volea.

El conjunto blanco no bajó el ritmo tras el gol y siguió controlando la posesión y el encuentro. Prueba de ello fueron los ocho saques de esquina que botó en los primeros 45 minutos. A pesar de esto, el Sevilla tuvo un par de jugadas de peligro, propiciadas por sendos despistes defensivos. Pero en ambas apareció la figura de Casillas, jubilado por muchos, que volvió a demostrar porque es el titular de la portería madridista.

CRISTIANO GOLPEA DE NUEVO

Tras la reanudación, Cristiano volvió a enseñar los dientes y subió el segundo al marcador en el minuto 50, tras una jugada que de nuevo inició Kroos, sublime en el centro del campo. El alemán combinó con Benzema, que asistió a Ronaldo para que ampliara la ventaja de su equipo con su segundo tanto, tras fusilar a Beto con un potente zurdazo cruzado.

A partir de aquí, el equipo blanco gozó aun más de la posesión y se por momentos se le vio bastante cómodo. En los últimos compases del encuentro, el Sevilla se vino arriba y disfrutó de varias ocasiones, pero sin el premio del gol. Con este resultado, el Real Madrid conquista su segunda Supercopa después de la conseguida en 2002 ante el Feyenoord y deja un gran sabor de boca en su estreno oficial.

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