El presidente de Estados Unidos se encuentra en un aprieto. Su ex abogado Michael Cohen quien se declaró culpable el martes ante un tribunal de Nueva York por violar las leyes de financiación de la campaña electoral de 2016, ha amenazado con revelar información sobre una posible interferencia rusa en las elecciones.
Cohen infringió las leyes de financiación al tramitar un pago de $130,000 a la actriz porno Stormy Daniels, y otra de $ 150,000 a la ex modelo de Playboy Karen McDougal para tratar de evitar que las mujeres hicieran públicas supuestas relaciones sentimentales que habían mantenido con Trump justo antes de las elecciones presidenciales de 2016. Cohen admitió el martes que había actuado bajo las órdenes del candidato, refiriéndose al actual presidente.
Lanny Davis, el abogado de Cohen, dijo: "Hoy se puso de pie y atestiguó, bajo juramento, que Donald Trump lo ordenó a cometer un crimen pagando a dos mujeres con el propósito principal de influir en una elección".
"Si esos pagos fueron un crimen para Michael Cohen, entonces ¿por qué no serían un crimen para Donald Trump?", añadió.
Según Reuters, el abogado de Cohen también admitió el miércoles que su cliente tiene conocimiento sobre ciertos temas que podrían ser de interés para el consejero especial Robert Mueller en su investigación sobre una posible interferencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016.
El mismo martes, el ex presidente de la campaña de Trump, Paul Manafort, también fue declarado culpable en un juicio aparte y podría enfrentarse a hasta 80 años de cárcel.
El martes en un acto público, Trump aludió al juicio de Manafort diciendo que no había evidencia de confabulación ya que los crímenes de Manafort ocurrieron antes de involucrarse con el presidente.
El presidente no hizo ningún comentario acerca del juicio de Cohen.
Es improbable que Trump se enfrente a posibles delitos penales mientras siga siendo presidente, pero podría ser destituido por el Congreso si se le impugnara por "altos crímenes y delitos menores", aunque eso requeriría una mayoría de dos tercios en el Senado.
En mayo, Trump admitió que conocía los pagos realizados por Cohen, pero negó que estuvieran vinculados de algún modo con su campaña electoral o que involucraran fondos de la campaña.
Rudy Giuliani, el abogado de Trump, dijo a los periodistas: "No hay ninguna acusación de ningún delito contra el presidente en los cargos del gobierno contra el Sr. Cohen.
"Está claro que, como señaló el fiscal, las acciones del señor Cohen reflejan un patrón de mentiras durante un período de tiempo significativo", agregó.
