El deflactor de consumo privado PCE en Estados Unidos ha caído en junio hasta el 3% en tasa interanual, tras cerrar mayo en el 3,8%, según los datos publicados este viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Comercio estadounidense. En cuanto a la inflación subyacente, ha bajado hasta el 4,1%, cinco décimas inferior al registro del mes anterior.
Este descenso de la inflación PCE, uno de los indicadores seguidos más de cerca por la Reserva Federal, ha estado cerca de lo esperado por el mercado, ya que el consenso de analistas había pronosticado una caída ligeramente menos pronunciada, en concreto de una décima menos, en ambos índices.
En términos mensuales, el avance ha sido del 0,2% para los dos índices, que venían de aumentos en mayo del 0,1%, en el caso de la inflación general, y del 0,3% en la subyacente. Por su parte, los precios de los alimentos disminuyeron un 0,1%, mientras que el índice de la energía aumentó un 0,6%.
El mayor aumento se registró en los servicios, que se encarecieron un 0,3% en el sexto mes del año, mientras que el coste de los bienes descendió un 0,1%. En la comparativa interanual, se ha registrado un descenso del 0,6% para los bienes, y un aumento del 4,9% en el caso de los servicios.
Además, los ingresos personales subieron un 0,3% (69.500 millones de dólares) en junio, y los ingresos personales disponibles aumentaron también un 0,3% (67.500 millones). Por su parte, los gastos de consumo personal treparon un 0,5% (100.400 millones).
