El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha anunciado este jueves que tiene intención de retirar las concertinas de las vallas situadas en las fronteras terrestres de Ceuta y Melilla con Marruecos y piensa pedir para ello un "informe complementario". "Haré todo para que las concertinas puedan ser retiradas", ha señalado.
La concertina es un tipo de alambre de cuchillas fabricado en grandes bobinas que se colocó en las vallas de Ceuta y Melilla
En una entrevista en Onda Cero, Grande-Marlaska ha asegurado que esa es una de sus "principales voluntades". "Si estamos hablando de solidaridad, de respeto a las personas, controlando los flujos migratorios, ayudando en origen colaborando con las autoridades de esos países, pero si esas personas ya están al lado de la valla, vamos a mirarlo, creo que es algo razonable", ha señalado.
"Hay que trabajar en origen, por ejemplo, nunca llegar al extremo de las concertinas", ha dicho el ministro. La concertina es un tipo de alambre de púa o alambre de cuchillas fabricado en grandes bobinas que se colocó en las vallas de Ceuta y Melilla, y que suscitó una gran polémica por las heridas que causaban a todo aquel que intentaba saltar las vallas. Ahora, tras abrir las puertas de España al buque Aquarius, que traslada a más de 600 migrantes a los que ningún país quería acoger, el Gobierno de Pedro Sánchez vuelve a mostrarse preocupado por los flujos migratorios con estas declaraciones de Grande-Marlaska.
El titular de Interior ha dejado claro en la entrevista que lo que existen son "violencia, esclavitud o mafias", por lo que las medidas del Gobierno no pueden considerarse un efecto llamada, ya que la realidad es que existe un "efecto huida". En este sentido, Grande-Marlaska ha explicado que "este Gobierno ha asumido una responsabilidad ética".
También ha aprovechado para señalar que las 630 personas a bordo del Aquarius, embarcación gestionada por las ONG Médicos Sin Fronteras y SOS Mediterranee, no recibirán el estatus de refugiado, como en un primer momento se indicó, subrayando que que "cualquier petición de asilo conlleva un trámite", cuyo procedimiento se rige por la Ley 2009.
"El comportamiento del Gobierno hacia esas personas va a ser idéntico, aplicando la legalidad vigente, que da a aquellos otros que vienen por vía Marruecos o Argelia hacia nuestro país", ha señalado. Tal y como ha explicado el ministro, "se abrirán los expedientes, si solicitan asilo se tramitará y si no lo hacen, se tramitará el expediente de expulsión que proceda".
ACERCAMIENTO DE LOS INDEPENDENTISTAS... SI LO AUTORIZA EL JUEZ
Asimismo, el titular de Interior ha respaldado que se traslade a prisiones de Cataluña a los exconsejeros y líderes del 'procés' si así lo autoriza el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena. "Si en cinco o seis meses esa persona no va a ser requerida, y siempre que haya autorización del juez, se puede evaluar un traslado que ayude a una vida personal y familiar más fácil", ha asegurado.
Y es que, "cuando son presos provisionales están a disposición del órgano judicial, por eso están en cárceles próximas a donde está el órgano judiciales porque mañana le pueden citar a declarar, notificar algo personalmente y no se pueden hacer traslados de un día para otros", ha argumentado el ministro. Grande-Marlaska ha insistido en que "se podría y se debería evaluar" un traslado a cárceles catalanas de los líderes independentistas en prisión provisional para facilitar su vida familiar, pero siempre que el juez haga constar que "no hay inconveniente".
