La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, se defendió este miércoles de las acusaciones del PP y de la Comunidad de Madrid sobre la ligereza con la que el Gobierno ha decidido reabrir las fronteras tras la pandemia y los controles insuficientes en el aeropuerto de Barajas de la siguiente manera: “Ni antes éramos timoratos, ni ahora somos temerarios. Antes y ahora somos responsables”.
Así se pronunció la jefa de la diplomacia española, en una entrevista en RNE recogida por Servimedia, coincidiendo con el primer día en que la UE ha reabierto sus fronteras exteriores con 14 países: Argelia, Australia, Canadá, Corea del Sur, Georgia, Japón, Marruecos, Montenegro, Nueva Zelanda, Ruanda, Serbia, Tailandia, Túnez y Uruguay. China será incluida en la lista, siempre y cuando permita la entrada en su territorio de ciudadanos europeos.
La ministra restó importancia a la dificultad para que Bruselas consensuara la lista de países considerados “seguros” al afirmar que “ha sido como son las negociaciones comunitarias, con mucha sal y con mucha pimienta, pero lo importante es el resultado” que, desde su punto de vista, “da un mensaje muy claro” a la comunidad internacional: la UE se basa en criterios epidemiológicos y no se enreda en discusiones diplomáticas a la hora de reabrir sus fronteras.
La ministra no quiso pronunciarse sobre el hecho de que Italia se haya descolgado del pacto al decidir imponer una cuarentena de 14 días para todos los países ajenos a la zona Schengen.
“Somos extremadamente respetuosos con las decisiones que cada país quiera tomar”, dijo.
Respecto de la críticas del PP y la Comunidad de Madrid sobre la ligereza con la que el Gobierno ha decidido reabrir las fronteras tras la pandemia y los controles insuficientes en el aeropuerto de Barajas, la ministra comentó que el Gobierno se limita a seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias y científicas nacionales o internacionales.
Esto le sirvió para dejar claro que “ni antes éramos timoratos o pacatos no abriendo las fronteras, a pesar de que la oposición casi nos empujaba a hacerlo para no colapsar el turismo, ni ahora somos temerarios. Antes y ahora somos responsables”.
Por ello, llamó a la oposición a entender que “este es un desafío común”, puesto que “todas las fuerzas políticas gobernamos en todos los niveles administrativos”.