La cabeza europea, Alemania, se está enfrentando desde hace a unas semanas a una situación de refugiados de guerra complicada. Por ello, Wolfgang Schäuble, el ministro de Finanzas, está estudiando nuevos recortes en el gasto para poder financiar el flujo de migrantes.
Así lo ha señalado al menos el medio alemán Der Spiegel en informaciones que ha recogido la agencia Reuters.
De esta manera, el político propone desviar hasta 2.000 millones de euros del presupuesto del año que viene al objetivo de frenar la difícil crisis de los refugiados que unen mayormente desde Siria.
Además, la agencia ha apuntado que el portavoz del ministerio no ha querido hacer comentarios con respecto a estos datos. Por el momento, el dinero invertido en la crisis de los refugiados es ya de alrededor 500 millones de euros que ya se han destinado para apoyar a las ciudades europeas que deben hacer frente al gran flujo de migrantes y refugiados a sus fronteras y costas.
Los datos que se estiman de refugiados en Alemania son claros. Sólo en el país de Merkel se espera que la cifra de los solicitantes de asilo se cuadriplique este año hasta aproximadamente las 800.000. Los municipios colindantes con otros países y cercanos a la fronteras ya registran algunos problemas de pago de alojamiento a estas personas y financiar su atención médica.
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