Los mercados asiáticos han cerrado en negativo este miércoles pese a los máximos logrados en la sesión previa en Wall Street. También, a pesar de que los últimos datos publicados muestran que la economía china se está recuperando. La peor parte se la ha llevado el Kospi de Corea del Sur, que ha caído un 1%.
Además del índice surcoreano, el resto también se han teñido de rojo. El Nikkei de Japón ha caído un 0,3% y el Hang Seng de Hong Kong, un 0,62%.
Las acciones chinas fluctuaron entre ganancias y pérdidas a medida que los inversores debatían si Pekín desaceleraría el ritmo de flexibilización de las políticas después de un crecimiento económico más fuerte al esperado en el primer trimestre. Es probable que el banco central de China haga una pausa para evaluar las condiciones económicas antes de tomar medidas adicionales.
Esto, unido a que los inversores han rechazado el presupuesto suplementario propuesto por el gobierno destinado en parte a respaldar las exportaciones.
Los máximos marcados en Wall Street no han animado a las bolsas de Asia. Entre las compañías, las acciones de Samsung Electronics bajaron un 1,6%, mientras que el otro protagonista de la sesión ha sido el fabricante de chips Texas Instruments. El grupo dijo que espera que la desaceleración de la demanda de microchips dure unos cuantos trimestres más. "Texas Instruments ha publicado algunos buenos resultados, pero ha echado un poco de agua fría sobre lo que sucederá en la segunda mitad del año", afirman desde Societe Generale.
