bde

El Banco de España ha constatado en su prueba de estrés que el conjunto del sector bancario español sería capaz de resistir el impacto de la crisis del Covid-19, en parte, gracias a las medidas de apoyo, si bien ha anticipado efectos negativos sobre sus ratios de solvencia.

La edición de otoño del Informe de Estabilidad Financiera alerta de que la segunda ola del coronavirus puede retrasar la recuperación económica e incrementar los riesgos derivados de la pandemia, entre los que sitúa la baja rentabilidad de las entidades bancarias y el potencial deterioro de su solvencia.

Los dos escenarios que utiliza el test de estrés del Banco de España son una caída del PIB del 1,6% para el periodo 2020-2022 (escenario base) y del 5,7% (escenario adverso), mientras que las entidades se dividen en tres grupos: las que están sujetas a la supervisión directa del Mecanismo Único de Supervisión (MUS) y que cuentan con una actividad internacional más significativa, el resto de entidades supervisadas directamente por el MUS y aquellas bajo supervisión directa del Banco de España (de menor tamaño y sin actividad internacional destacable).

El primer grupo de entidades, que parten de una ratio CET1 de 11,9%, experimentarían en 2022 una disminución de su ratio de 2 puntos bajo el escenario base (hasta 9,9%) y de 3,9 puntos en el escenario adverso (hasta 8%).

Por su parte, el resto de entidades bajo supervisión directa del MUS, que parte de una ratio CET1 del 13%, terminaría 2022 con una ratio del 12% en el escenario base (-1 pp) o del 8,4% en el escenario adverso (-4,6 pp).

Finalmente, las entidades bajo supervisión nacional directa, que parten de una ratio de 17,9%, ven aumentado su ratio en 0,8 puntos en el escenario base, hasta el 18,7%, y la reducen en 1,3 puntos en el adverso, hasta 16,6%.

Según ha explicado el director general de Estabilidad Financiera, Regulación y Resolución del Banco de España, Ángel Estrada, este tercer grupo de entidades, que mejoran su posición de solvencia en el escenario base y obtienen la menor reducción en el escenario adverso, tienen un modelo de negocio más sencillo y conservador en cuanto a productos, con un mayor peso de préstamos hipotecarios y tenencia pública, así como un limitado alcance geográfico.

De su lado, el primer grupo puede permitirse partir de unos niveles de capital menores gracias a la diversificación de su negocio. "Tienen otras que les permiten absorber con menores pérdidas las perturbaciones que reciben. Es importante mirar los niveles de capital, pero también la capacidad de absorción de shocks de las entidades", ha apuntado.

A raíz de los resultados del test, el Banco de España concluye que el sector bancario español se muestra "capaz de resistir el elevado impacto económico de la crisis sanitaria, con el apoyo del efecto mitigador de las medidas implementadas por las autoridades económicas".

De hecho, el informe advierte de que una reducción o modificación de los programas de apoyo económico y financiero, así como la persistencia de los efectos negativos de la pandemia sobre la actividad económica, supondría un desafío adicional significativo a la solvencia del sector.

Noticias relacionadas

contador