La 'hora de la verdad' ha llegado para Donald Trump. Y es que este lunes comienza el primer juicio penal a un expresidente en la historia de Estados Unidos. El magnate está acusado de falsificación contable a raíz de los pagos a la actriz porno Stormy Daniels en 2016.
Trump será juzgado por 34 delitos relacionados con el esquema de falsificación documental que creó para sobornar a la estrella pornográfica a cambio de su silencio sobre una relación que habían mantenido una década atrás. Todo ello sucedió en plena campaña electoral.
Con el objetivo de ocultar estos pagos, el entonces abogado de Trump -Michael Cohen- pagó directamente el dinero a Daniels con fondos propios, los cuales le fueron reembolsados por la Organización Trump a través de varias cuotas que fueron registradas falsamente como anticipos de honorarios legales en los libros de la compañía.
La Fiscalía sostiene que las falsificaciones de registros, que en sí mismas son delitos menores, fueron hechas para violar las leyes electorales federales y estatales, así como leyes fiscales estatales.
Algunos expertos legales consideran que el caso es el de menor trascendencia de los cuatro procesos penales que enfrenta, pero es el único por el que será juzgado antes de las elecciones del 5 de noviembre.
Trump se ha declarado "no culpable"; no obstante, si se logran vincular los cargos con delitos electorales federales y estatales podrían llevar al candidato republicano a una década en prisión, aunque eso no le privaría de poder presentarse a las elecciones presidenciales.
En sus otros tres casos penales, se le acusa de manejar mal información clasificada y de intentar revertir su derrota electoral de 2020 ante el demócrata Joe Biden.
