El trabajo híbrido que combina ir presencialmente a la oficina con teletrabajar desde casa tiene muchas papeletas para ser el futuro. Si la empresa ofrece a sus empleados elegir qué días acudir de forma presencial y qué días trabajar a distancia, que serán la mayor parte de ellos, no está de más conocer cuáles son los mejores para ambas opciones y así minimizar el estrés.
Según Nicholas Bloom, profesor del departamento de Economía de la Universidad de Stanford, "las encuestas muestran que un lugar de trabajo híbrido, en el que los empleados pasan algunos días en la oficina y otros en casa, es el plan de vuelta al trabajo más favorecido por las empresas estadounidenses tras la pandemia". Además, también sostiene que la mayoría de las empresas planean dejar que sean los empleados los que decidan por sí mismos qué días trabajar en casa, ya sea de forma individual o en equipo.
Amanda Mull, periodista de 'The Atlantic', afirma que si el teletrabajo supone una novedad para ti y puedes elegir cuántos días teletrabajar, deberías comenzar "con tres días en persona y dos días a distancia", ya que "seguirás estando en casa la mayor parte de la semana, lo que puede ayudar a que un jefe reticente entre en razón, pero tendrás la suficiente flexibilidad para marcar una diferencia real en tu vida laboral".
Según la organización semanal de las empresas, hay días en los que es preferible acudir presencialmente para, por ejemplo, tener reuniones que permitan concretar las responsabilidades de los empleados. Un artículo publicado por 'The Economist' especifica cómo debería dividirse la semana:
LUNES
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Es por excelencia el día preferido para quedarse en casa tras un fin de semana de excesos. De hecho, durante los siglos XVIII y principios del XIX, cuando se cobraba el sábado, el absentismo del primer día oficial de la semana laboral era tan común que se conocía como 'san Lunes'.
Desde el punto de vista laboral, el lunes suele ser un día en el que se celebran reuniones de equipo y se establecen las prioridades para el resto de la semana. Por lo tanto, es preferible acudir a la oficina este día y posponer el tiempo de trabajo en casa para más adelante.
MARTES
A los maniáticos del orden puede no gustarles elegir este día para trabajar en casa, puesto que divide la semana laboral en dos partes desiguales. Además de romper la semana, trabajar en casa el martes parece ser una opción que pocos eligen, bien porque hay tareas pendientes en la oficina o funciones que concretar, o bien porque se desea dejar el descanso en el hogar para más adelante.
MIÉRCOLES
Al contrario que el martes, el miércoles sería el día perfecto para aquellos que adoren la simetría y el orden: dos días de trabajo en la oficina, un día en casa, dos días más en la oficina y luego el fin de semana para descansar. Se trata de un buen día para elegir teletrabajar. Además, las empresas no pondrán muchas trabas en que lo elijas, porque los lunes y los viernes serán las opciones más populares.
JUEVES
Aunque rompe la semana laboral, parece un día de teletrabajo menos preferido que el martes. Esto se debe a que, habiendo evitado ir a la oficina el jueves, tendrás que volver a desplazarte el viernes. Sin embargo, esta opción tiene sus ventajas, ya que permite empezar a pensar en el fin de semana el miércoles por la noche.
VIERNES
Al igual que el lunes, es una opción demasiado sospechosa para los jefes. Los compañeros sonreirán con conocimiento de causa y usarán sus dedos con comillas cuando digas que 'trabajas desde casa' los viernes. Los jefes te llamarán en varios momentos del día para intentar percibir señales reveladoras de la playa o piscina.
No hay necesidad de arriesgarse a experimentar esta sospecha de los directivos. De hecho, los viernes suelen ser los días más relajados en la oficina: los empleados suelen desaparecer para tomar cafés varias veces a lo largo del día y nadie hará demasiadas preguntas si no estás en tu mesa después de las 3 de la tarde.
Por supuesto, muchas empresas pueden permitir dos días de trabajo a distancia, lo que da lugar a otras diez combinaciones posibles. Para evitar sospechas, no elijas el lunes/viernes o el jueves/viernes como combinación de trabajo a distancia. El martes y el jueves pueden ser una buena elección, ya que significa que estarás en la oficina (y por tanto visible) cada dos días.
De hecho, Nicholas Bloom y su equipo realizaron una encuesta a más de 30.000 estadounidenses en edad de trabajar y a la pregunta de 'Si pudieras trabajar desde casa dos días a la semana, ¿qué dos días elegirías?', el 64% eligió los viernes como uno de los días para trabajar desde casa, seguido de los lunes con un 56%. Tan solo el 18% quería teletrabajar los miércoles, siendo esta la opción más favorable según 'The Economist'.
Shari Buck, cofundadora de Doximity, coincide con la elección de los miércoles como el mejor día para teletrabajar por varias razones. La primera de ellas es que teletrabajar este día "divide la semana muy bien: dos días en la oficina, un día trabajando a distancia y luego dos días más en la oficina".
Según ella, "esto supone un flujo de trabajo constante que equilibra las reuniones de planificación que suelen darse a principios de la semana, la jornada productiva desde casa y dos igualmente productivas y de colaboración al final de la semana".
Para Buck, "los miércoles en casa siguen siendo, después de todo, un día de trabajo como cualquier otro, y el hecho de que los empleados deban regresar a la oficina el jueves refuerza su sentido de la responsabilidad". También incide en que, además, "trabajar a distancia los miércoles, y no los lunes o los viernes, evita caer en la tentación de alargar los fines de semana".
Contrario a la flexibilidad a la hora de elegir cuándo trabajar es Nicholas Bloom, que sostiene que deberían ser los empresarios los que dictasen qué días teletrabajar y cuáles acudir a la oficina, ya que también se tendría en cuenta el número de empleados que acuden presencialmente, haciendo respetar el aforo máximo permitido en cada oficina.
Además, en la investigación realizada, Bloom también descubrió que las personas que trabajan a distancia a tiempo completo o la mayor parte del tiempo tienen muchas menos probabilidades de ser ascendidas que sus compañeros que trabajan 'in situ'.
