• Las mejoras que se hayan realizado en el inmueble siempre incrementarán el precio
  • Los expertos recomiendan, por encima de todo, estar seguros porque es una gran inversión
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Los precios del alquiler no dejan de subir, por lo que muchos han optado últimamente por lanzarse a la compra de una vivienda, dado el mejor estado de salud de la economía familiar y también ante la mejora experimentada por el mercado hipotecario, con los bancos concediendo cada vez más créditos. No obstante, antes de convertirse en propietario conviene tener en cuenta algunos detalles que pueden encarecer o abaratar la operación.

El potencial propietario debe decidir si quiere un inmueble totalmente reformado o si prefiere uno que necesite algún que otro arreglo

Por ejemplo, hay elementos que revalorizan el precio de una vivienda, como son el hecho de que esté o no reformada, o que cuente con aire acondicionado, algo tan 'cotizado' en verano. Las mejoras que se hagan en un piso encarecerán su precio, por lo que el nuevo propietario debe tener en cuenta si le compensa o no adquirir un inmueble totalmente reformado y con todas las mejoras que pueda desear o si, por el contrario, prefiere hacerse con un piso que necesite algún que otro arreglo, lo que sin duda abaratará la factura final.

Según el último 'Informe sobre el Precio de la Vivienda en España' elaborado por Mitula Group, con datos correspondientes al segundo trimestre de 2017, elementos relativos a la propia construcción del inmueble, como la situación o la antigüedad pueden influir en el precio, pero también el estado del mismo, es decir, si está reformado o no, o los equipamientos con los que cuente. De esta forma, una casa sin reformar es un 17,18% más barata en el conjunto de España que otra en la que sí se hayan realizado obras de mejora. Además, en lo referente al equipamiento del inmueble, el hecho de que cuente con garaje resulta un 18,64% más caro para el potencial comprador que carecer de aparcamiento.

Aunque, sin duda, la característica aparentemente más valorada por el mercado es disponer de ascensor. En todo el territorio nacional la ausencia de elevador supone una depreciación de un 39,33% en el precio final de una vivienda respecto a otra que cuente con este equipamiento, según el mencionado informe. ¿Y una terraza, puede incrementar el valor de una vivienda? Pues lo cierto es que sí, aunque en menor medida que elementos anteriormente mencionados. En España, de media, una terraza puede aumentar el valor de un inmueble un 13,36%.

Y en este informe también se pone especial acento a la importancia del aire acondicionado… según la ciudad en la que se busque piso. Por ejemplo, en zonas con climas más cálidos el hecho de que una vivienda tenga o no aire se deja notar en el precio, pudiendo incrementarlo casi un 20%. En Barcelona es donde más incidencia tiene, hasta el punto de que los inmuebles que cuentan con climatización son un 19,89% más caros que la media. Y lo mismo ocurre en Valencia, donde el aire encarece un piso en un 18,43%.

En cambio, en el caso de Madrid y Sevilla, pese a contar con veranos cálidos en los que el aire en una vivienda siempre es bienvenido, el hecho de que un inmueble cuente con aire no se tiene tan en cuenta como en los casos anteriores. Así, en Madrid incrementa el precio en un 5,01%, mientras que en la capital hispalense lo hace en un 9,29%. Y en otras ciudades más frescas, como por ejemplo Bilbao, el aire apenas se deja notar, ya que esta mejora sólo incrementa el precio de un piso en un 0,10%.

Desde el portal Idealista aconsejan marcar “lo que se considera imprescindible, lo importante y lo que nos gustaría tener, pero pasaríamos sin ello”, para saber qué elementos debe tener o no una vivienda para darle el ‘sí, quiero’ y comprarla.

ESTAR SEGUROS, ES UNA GRAN INVERSIÓN

El mercado inmobiliario viene experimentando una recuperación progresiva que tocó techo en mayo, último mes del que hay registros sobre la compraventa de vivienda en España. Los datos dados a conocer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) revelaron un repunte del 23% hasta las 44.782 operaciones, la cifra más alta desde febrero de 2011.

Cada vez son más los que se lanzan a la búsqueda de una casa en propiedad, pese a que los precios han subido en torno al 2%, sobre todo ante la subida que también ha experimentado el precio de alquiler, que según portales inmobiliarios como Fotocasa se ha incrementado un 2,3% en el segundo trimestre, y apoyándose en la vuelta de la financiación. La última estadística de hipotecas dada a conocer por el INE, con datos del mes de mayo, reflejaba una vuelta a tasas positivas de la firma de hipotecas sobre viviendas, al haberse incrementado un 9,2% en el quinto mes del año. En concreto, se constituyeron 29.012 nuevas hipotecas.

La compra de una vivienda es “una gran inversión”, por lo que hay que ser consciente de todo lo que acarreará

Por ello, ante la tendencia que se está apreciando, desde Fotocasa recuerdan que la compra de una vivienda supone “una gran inversión”, por lo que hay que ser consciente de todo lo que acarreará. “Una vivienda es una inversión a largo plazo, por lo que cualquier decisión que se tome deberá pensarse a futuro, teniendo en cuenta factores como la zona, el tipo de vivienda, la antigüedad o las características” de la misma, remarcan desde el portal.

Beatriz Toribio, responsable de estudios de Fotocasa, asegura que “el sector inmobiliario vive uno de sus mejores momentos” y, pese a que se han producido algunos datos negativos, “la tendencia es positiva a medio y largo plazo”. “El crecimiento es sostenible y se está consolidando, aunque a diferentes ritmos según las zonas”, remarca.

Por su parte, Fernando Encinar, jefe de estudios de Idealista, también habla de la normalización del mercado, y dice que “el incremento en los precios de venta está acompañado por un crecimiento en la concesión de hipotecas y en el número de operaciones cerradas”, y aunque “la normalización se está produciendo a dos velocidades, hay que destacar que las distancias se van acortando y son cada vez más los municipios españoles que se acercan a su punto de equilibrio”.

Eso sí, Toribio advierte que pese a que “el sector está retomando su actividad de forma firme y consolidada” gracias a “la mayor financiación hipotecaria, cierta mejoría económica y del empleo, y al interés de los inversores por la vivienda”, no hay que olvidar que “venimos de muy abajo debido al fuerte ajuste vivido durante años”. “La recuperación va a llevar tiempo y será moderada porque el sector tiende a su normalización”, concluye.

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